Amann y Alonso fijan un calendario para la puesta en marcha del tranvía en Vitoria

Si la cuestión no se tuerce en los próximos meses, Vitoria contará con un trazado definitivo de tranvía durante el primer trimestre de 2002 y con la contratación de las obras de construcción a finales de ese mismo año. Tanto el consejero de Obras Públicas, Álvaro Amann, como el alcalde vitoriano, Alfonso Alonso, manifestaron tras la reunión que mantuvieron ayer su voluntad de que salga adelante este proyecto, que hace cuatro años fue desechado por el propio Ayuntamiento vitoriano ante las reticencias que levantaba entre algunos partidos y parte de la opinión pública. En aquella ocasión, el responsable vasco de Transportes era el socialista José Antonio Maturana y su oferta pasaba por la implantación del tranvía sin desembolso alguno por parte de la institución local.

Ahora las cosas han cambiado de manera sustancial. Todos los grupos del consistorio, en un inusual consenso, respaldan la implantación del denominado metro ligero. El coste del proyecto no puede ser definido hasta que no se concrete el trazado, pero se sufragará a partes iguales entre las instituciones y la operadora que lo gestione. De la mitad institucional, un 65% corresponderá al Gobierno vasco, el 15% al Ayuntamiento y el restante 20% a la Diputación alavesa.

El titular de Transportes aseguró que una infraestructura de este tipo tiene un coste de 500 millones de pesetas por kilómetro. Amann indicó que, de las opciones de recorrido que estudia la ingeniería Sener, encargada del proyecto de trazado, los ciudadanos podrán contemplar las tres con más posibilidades.