Tierra de dinosaurios
Morella alberga nuevos hallazgos de restos fósiles y una exposición del Museo Nacional de Ciencias Naturales
Los dinosaurios ocupan este otoño, con gran protagonismo, la ciudad de Morella. Por un lado, la capital de Els Ports tiene muchas posibilidades de convertirse en la sede nacional para el 2003 del Congreso anual que celebran las Sociedades Paleontológicas de España. Por otra parte, la exposición Dinosaurios de Morella, creada por el Museo Nacional de Ciencias Naturales de Madrid y el Ayuntamiento de Morella y que permanece abierta en las salas góticas de la casa municipal, está registrando una exitosa entrada de miles de visitantes. La exposición cuenta con una reproducción a tamaño natural de un impresionante Iguanodon que abre las puertas a una colección muy interesante de restos fósiles de dinosaurios de Morella, pertenecientes al Museo Nacional de Ciencias Naturales. Son restos procedentes de la colección de más de 1.000 piezas que aportaron, entre los siglos XIX y XX, los valencianos Juan Vilanova y José Royo al museo nacional. Vilanova, primer catedrático de Geología y Paleontología de la Universidad Central de Madrid, halló en 1873 diversos restos de Iguanodon en Utrillas y Morella. Los fósiles morellanos fueron determinantes en las primeras investigaciones sobre dinosaurios en España.
Otra de las pautas que marcan este destacado momento paleontológico de Morella se centra en los avances científicos que acaban de descubrir, entre los restos museísticos del centro local Temps de Dinosaures una nueva especie de dinosaurio, única en el mundo y sin catalogar, perteneciente a la familia de los Brachiosauros, el animal terrestre de mayores dimensiones que habitó la Tierra. Los paleontólogos Pilar Yagüe, de la Universidad Autónoma de Madrid, y el doctor Paul Upchurch, prestigioso científico del Museo de Zoología de Cambrigde y uno de los investigadores de saurópodos más importantes del mundo, han presentado recientemente en el marco de un congreso internacional celebrado en la ciudad británica de York, el resultado de las investigaciones realizadas en la colección museística de Morella que han permitido identificar una nueva especie. Los restos, descubiertos en los años ochenta en varios yacimientos, en los que participó el morellano Francisco Yeste -artífice de numerosos hallazgos-, pertenecen a un enorme saurópodo, todavía sin nombre, de características diferentes a los encontrados en otras partes del mundo. Esta especie herbívora, que comía al día 200 kilos de plantas, se caracteriza por su largo cuello y medía unos 23 metros de largo y 13 de alto, con un peso entre 80.000 y 90.000 kilos.
Asimismo, hace unos días, en uno de los tramos de las obras de remodelación de la carretera Morella-Sorita, se hallaron restos óseos fosilizados de Iguanodon que han sido trasladados a Valencia para su estudio.
Y, por último, cada vez que las máquinas extractoras se mueven en la mina de arcilla de La Parreta, Víctor Beltrán, responsable de la firma Arcillas Vega del Moll, junto a José Miguel Gasulla, arqueólogo de la empresa, esperan que la tierra entregue una nueva pieza del puzzle de fósiles que va conformando el impresionante esqueleto de un Iguanodon, dinosaurio herbívoro de gran tamaño.
Desde que esta empresa castellonense iniciara el pasado año los trabajos de explotación de la cantera, cuya arcilla se destina a la industria azulejera, la presencia de huesos fósiles ha sido constante, dado que se trata de una de las áreas de las capas rojas de Morella (limolitas arcillosas) que albergan los mayores restos. De ahí que la empresa cuente en su plantilla con los servicios de un arqueólogo. Cuenta José Miguel Gasulla que las decenas de huesos hallados en esta mina aportan nuevos datos a la presencia de los dinosaurios hace más de cien millones de años, en el periodo cretácico.
En una de las torres de la muralla medieval de Morella, se almacenan estos restos que este arqueólogo está clasificando minuciosamente. Hay, por ejemplo, un espolón íntegro de este Iguanodon de unos 11 metros de longitud y casi 4 metros de altura y numerosas piezas cervicales, dorsales, el hueso sacro, dedos, dientes, mandíbulas, huesos de la cabeza, costillas, ligamentos. Además, Gasulla muestra especial interés por otros restos pertenecientes a otros animales como cocodrilos, tortugas y otras especies de dinosaurios.
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