Una Unidad de Calidad coordina los modelos catalán y andaluz
'La competitividad de las universidades se medirá, entre otras cosas, por los contratos-programa, planes estratégicos, además de que las universidades están diseñando programas evaluaciones periódicas de calidad', explica el responsable andaluz de Universidades, Francisco García. La financiación 'básica' o 'subvención corriente asciende', con el nuevo PPF andaluz, a 97.300 millones en su primera anualidad. A esto se añade un 10% de financiación por objetivos y otro 20% de financiación privada o externa, en la que se incluyen tasas y matrículas. La Junta de Andalucía se propone pasar de la actual inversión que ronda el 0,76% del PIB andaluz al 1,5% al final del periodo 2000-2006, periodo en el que destinará a la enseñza básica y media el 6% de su PIB.
Pero para lograrlo, la Junta quiere acabar con la 'regionalización', con la 'proliferación de universidades' -surgidas, fundamentalmente, a partir de que el PP ganará algunas capitales y sobre todo el Gobierno central en 1996-, y con 'la mayor discrecionalidad en el reparto de recursos, que ha ido paralelo al proceso de implantación de las nuevas universidades y títulos'.
Los mecanismos correctores y de impulso para mejorar 'la competitividad' del sistema universitario público andaluz están fincados sobre la base del 'consenso'. Consenso es la palabra mágica sobre la que el responsable autonómico de Andalucía está edificando las nuevas reglas del juego. Para ello, Andalucía cuenta ya con un instrumento de indudable valor denominado Unidad de Calidad de las Universidades. Se trata, según explica, de una especie de 'consorcio mixto coordinado por los vicerrectores de la distintas universidades, en el que también partipan miembros de la Junta de Andalucía'.
Coordinar la I+D+i
'Un modelo muy parecido', precisa, 'a la agencia de calidad de Cataluña'. Esta Unidad que podría ser reconvertida en forma de Agencia de Calidad y Evaluación -una vez que se apruebe e implante la nueva Ley Orgánica de Universidades (LOU)- será la encargada de 'elaborar todo el elenco de indicadores de calidad y de programas para mejorar los planes de calidad que ya funcionan en investigación y docencia'. En estos momentos, las nueve universidades públicas, todas ellas muy heterogéneas [algunas son centenaria y otras de muy reciente creación y disparidad de alumnos] trabajan en el diseño de un órgano común a la manera de Servicios Centrales, que coordine también las OTRI (Oficinas de Tranferencia Tecnológica).
(Información elaborada en coordinación con Sergio Mellado)
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