Kaspárov insiste en que el dinero de la FIDE es "robado"

"Yo no juego por dinero robado". Gari Kaspárov justifica así su negativa a disputar el Campeonato del Mundo de la Federación Internacional (FIDE), a partir del próximo día 27 en Moscú, y vuelve a la carga sobre la procedencia de los premios, gestionados por Kirsán Iliumyínov, el presidente de la FIDE. El 'número uno' da a entender que se enfrentará a Vladímir Krámnik, el campeón oficioso, en las mismas fechas, también en Moscú, pero no lo asegura.

Kaspárov ha acusado varias veces a Iliumyínov, quien también preside la república autónoma rusa de Kalmikia (muy cerca del Cáucaso), de "manejar dinero sucio", aunque nunca ha aportado pruebas de ello. Ahora utiliza una palabra más precisa, pero tampoco da detalles.

Cuando el periodista Andréi Vandenko, de la revista Sobesédnik, le pregunta por qué no disputa el Mundial, a pesar de la oferta de un millón de dólares (185 millones de pesetas) que le hizo la FIDE, contesta así: "Yo no juego por dinero robado. Tengo un elevado concepto del honor, que no puede medirse en dinero. Probablemente, esto no es hoy muy popular. Quizá no se comprenda ni se apruebe este tipo de comportamiento, pero no veo ningún motivo para traicionar mis principios, que son fundamentales en mi vida".

Kaspárov insinúa que la FIDE también ofreció dinero a Anatoli Kárpov para jugar el Mundial. La FIDE admite que sí lo hizo con Kaspárov, pero asegura que no con Kárpov. Éste, frontalmente enfrentado con la FIDE durante los últimos años, rompió su compromiso con Kaspárov y Krámnik para disputar un torneo triangular en las mismas fechas. Su explicación, publicada en un comunicado, se resume en que se siente en buena forma tras ganar el torneo de Buenos Aires, y en que sus amigos le han recomendado que intente recuperar el título mundial.

Aparte de consideraciones éticas, Kaspárov se explaya sobre la situación deportiva de Kárpov: "Quizá Anatoli Yevguénevich tenga sus propios principios… Sólo quiero decir que no es serio considerar a Kárpov como un aspirante al título de la FIDE. Claro que él puede apelar a su victoria en el torneo de Buenos Aires, donde el 2º fue Víktor Korchnói, que tiene 70 años. Pero sus victorias sobre [el brasileño Gilberto] Milos y [el argentino Pablo] Ricardi no incitan a pensar que Kárpov va a ganar todos los torneos. Si llega a los cuartos de final ya será una gran éxito para él. Pero es un problema de Kárpov", añade Kaspárov, tras aclarar que Krámnik y él tienen un contrato firmado con los organizadores del triangular, mientras Kárpov sólo se había comprometido verbalmente.

Kaspárov no niega las negociaciones para que el proyectado torneo triangular se convierta en un duelo de exhibición con Krámnik (mezcla de partidas lentas y rápidas), como apuntó recientemente el periodista Michael Greengard en un artículo publicado en el Club Kaspárov en Internet. Pero lo condiciona a que el premio del vencedor sea similar al del campeón de la FIDE (casi medio millón de dólares). ¿Encontrarán ese dinero los organizadores?, le pregunta Vandenko: "Es importante que lo hagan, porque si no Iliumyínov se convertirá en un tipo importante en nuestro país. Espero que no sea así".