La Unió celebra 25 años de labor sindical en el campo valenciano

El secretario general de la Unió de Llauradors i Ramaders, Joan Brusca, aseguró ayer en Algemesí que 'la situación del campo sería mucho peor sin la Unió' durante los actos previstos para conmemorar el XXV aniversario del nacimiento de esta organización agraria. Una apuesta que continua vigente es el lema de la celebración que continuará en las comarcas con presencia de este sindicato, que se constituyó en 1976 en Bonrepós 'por una necesidad objetiva', según dijo su primer dirigente Joan Ramón Peris.

Brusca no ocultó a los cerca de 400 afiliados que se desplazaron hasta Algemesí desde distintos puntos de la Comunidad que la situación agraria 'no atraviesa sus mejores momentos, ante la dificultad cada vez más palpable de rentabilizar las cosechas y las explotaciones'. No obstante les transmitió un mensaje 'de optimismo' si continuan en una organización 'fuerte y combativa'. El dirigente del sindicato pionero del campo destacó como uno de los logros de la organización las 14 pagas para los agricultores jubilados y la supresión del impuesto que tachó de 'franquista' de las jornadas teóricas, entre otros.

A la conmemoración acudieron los ex secretarios generales que tuvo la Unió de Llauradors y Ramaders, Joan Ramón Peris, Lucio Monteagudo y Miquel Vilalta. La intervención más emotiva correspondió al primer dirigente, Joan Ramón Peris que se retrotrajo a los inicios.

Fue 'un movimiento espontáneo' que arrancó en 1976 como consecuencia de la crisis de la fruta de verano. Peris rememoró las reuniones multitudinarias que se celebraron por aquellas fechas en las cooperativas de Carlet y l'Alcúdia ante la necesidad de reivindicar unos precios adecuados y los derechos en general de los agricultores. 'Nacimos desde abajo hacia arriba por una necesidad objetiva', precisó Peris, al tiempo que recordó las tres premisas de la organización: que fuera democrática, unitaria e independiente. El primer secretario general advirtió que se han padecido frustraciones y decepciones pero destacó que se ha sabido mantener 'la fidelidad a los orígenes'. El secretario de la Ribera Alta, Camilo Sebastiá, dio el punto reivindicativo de la fiesta: 'no se hacen elecciones en el campo porque a buen seguro que las ganaríamos'.

Varios afiliados recibieron placas conmemorativas. Salvador Hervás no tuvo empacho para manifestar que 'este oficio tan digno y tan grande sirve para alimentar a la humanidad', mientras que uno de los más veteranos Francisco Llácer, dejó claro que 'nunca tan pocos han hecho tanto por la agricultura'. Salvador García, ingeniero agrónomo,aconsejó a los agricultores que 'confíen en el servicio de seguros agrarios de la Unió porque es el mejor de los que funcionan en el País Valenciano'.