Los agravios de la precipitación
Los comerciantes de Jaén dicen que el carril-bus perjudica sus ventas
En Jaén, la entrada en servicio en septiembre del carril para autobuses y taxis en la avenida de Andalucía, una de las grandes arterias que atraviesa la ciudad, ha puesto en pie de guerra a los comerciantes de la zona. Convocados por la Asociación del Pequeño y Mediano Comercio (Peymeco), un centenar de propietarios de establecimientos cortaron el tráfico el pasado lunes en esta avenida como acto de protesta al considerar que sus ventas han disminuido hasta un 40% desde la creación de este carril
Además, pusieron el grito en el cielo por lo que consideran multas 'indiscriminadas' por parte de la Policía Local a los conductores y repartidores que estacionan durante unos minutos sus vehículos para hacer una gestión rápida en los comercios.
'No estamos en contra del carril bus-taxi, lo que queremos es que antes se lleve a cabo la reordenación de aparcamientos de la zona', afirma el presidente de Peymeco, José María Hermoso. Los comerciantes repartieron a los viandantes billetes de bonobús para dejar claro que no se oponen al uso del transporte público, y sí a la 'precipitación' con la que el Ayuntamiento ha adoptado la medida: el carril ha entrado en vigor antes de que acaben las obras de los aparcamientos subterráneos proyectados en la zona y de que se amplíen las zonas de carga y descarga, como demandan los comerciantes.
El concejal de Tráfico, Manuel Peragón, ha defendido la iniciativa en aras a 'potenciar la utilización del transporte público y a agilizar el tráfico'. El Ayuntamiento ya había implantado este carril en otras calles del centro y prevé, a medio plazo, extender aún más la medida.
El ayuntamiento se ha decidido a implantar el carril bus-taxi tras el fracaso estrepitoso que supuso la campaña informativa en contra del aparcamiento en doble fila, uno de los efectos más negativos para el tráfico en la capital. Además de la ineficacia de la campaña, el concejal de Tráfico tuvo que soportar duras críticas de asociaciones de mujeres y colectivos feministas por la utilización de chicas en minifalda y con patines que colocaban pegatinas a los vehículos mal estacionados.
