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Reportaje:Raíces

Buscando a un nuevo Blas Infante

Expertos analizan en Ronda las claves políticas, económicas y culturales de Andalucía

Algún integrante de la Fundación Blas Infante califica a esta asociación como el consejo regulador de Andalucía, es decir, un termómetro del estado de la región que sopesa aquello de si Andalucía va bien o no. Y, de momento, las impresiones no son muy positivas en lo que a identidad cultural se refiere. Falta de vertebración, excesivo provincialismo y cainismo latente entre los propios integrantes de una misma comunidad son algunos escollos.

Desde el jueves al sábado pasado, un centenar de estudiosos y expertos han asistido a un análisis de Andalucía desde diversos puntos de vista: político, económico, administrativo o cultural. En estos tres días, el objetivo ha sido radiografiar la región con vistas al nuevo milenio y a factores tan nombrados como la globalización.

El catedrático de Historia Económica de la Universidad de Málaga Juan Antonio Lacomba aboga por no perder las señas de identidad. 'Para que Europa nos tenga en cuenta y nos respete', recalcó durante la convención.

En el ámbito territorial, el catedrático de Análisis Geográfico Regional de la Universidad de Sevilla Gabriel Cano recoge el testigo de Blas Infante y cree conveniente una institucionalización de las comarcas como 'elemento de articulación de Andalucía'. El profesor argumentó que muchas de las divisiones territoriales actuales son 'artificiales', por lo que, en su opinión, la reordenación debería responder a criterios 'históricos, naturales y sociales'.

Desde la óptica económica, el director del departamento de Economía Aplicada de la Universidad de Sevilla Manuel Delgado destacó el carácter continuado de la economía de la región en los últimos 200 años. Delgado señaló que Andalucía 'no ha conocido el proceso de industrialización', a pesar de lo que piensan algunos historiadores, según él equivocados por haber analizado una realidad con esquemas externos. Para Manuel Delgado, la industria de la que hablan ciertos autores sólo ha sido una continuación de la producción agraria.

Andalucía 'no va bien', sostiene el vicepresidente de la fundación Blas Infante, Pedro Ruiz. El presidente del Parlamento andaluz, Javier Torres Vela, parecía responder a este aserto cuando afirmó en su intervención que ante los retos del tercer milenio, es necesario buscar 'nuevas recetas para afrontar la nueva realidad de la globalización. ¿Es el momento de un nuevo Blas Infante?

Educación para recuperar la identidad

El X Congreso sobre Andalucismo Histórico, celebrado la pasada semana a camino entre Ronda y Casares, donde nació el llamado padre de la patria andaluza, Blas Infante, ha puesto en evidencia que el uso de la educación es el principal fin para mejorar el estado de la región. Así lo certifica Pedro Ruiz, vicepresidente de la Fundación Blas Infante, que organizó el encuentro. Para Pedro Ruiz, a partir de la educación se podría evitar el excesivo 'cainismo' y pasar a 'recuperar el orgullo de ser andaluz y las señas de identidad del pueblo'. Los integrantes de la fundación creen necesario un estudio riguroso sobre el contenido de la historia andaluza. Así, este estudio debe servir para ultimar una verdadera implantación de lo que significa la comunidad andaluza en el sistema educativo. 'Que se enseñe la auténtica historia de Andalucía', recalca Pedro Ruiz. Otra conclusión del encuentro, el décimo desde el primero organizado en Sevilla en 1983, supone la petición de una ley de régimen local de Andalucía que le proporcione autonomía a la comunidad. Una ley que, según la fundación, debe estar dotada de una importante financiación para garantizar libertad de actuación. Uno de los grandes males de Andalucía para los baluartes de la causa de Infante es la falta de vertebración de la región. Así, consideran que debe aplicarse una reorganización del territorio para llegar a un modelo comarcal y no provincial. El mapa quedaría compuesto de seis grandes comarcas y otras 65 subcomarcas. Ésta es otra de las medidas que evitarían ese excesivo cainismo y lucha entre provincias, en opinión de Pedro Ruiz. El río Guadalquivir representa para los defensores de la unidad andaluza la gran columna vertebral de la comunidad. Por ello, en sus conclusiones hacen un llamamiento a los estamentos políticos para que se transfiera 'de una vez' la competencia sobre la Confederación Hidrográfica del Sur, lo que para ellos permitiría la óptima articulación de Andalucía. El X Congreso sobre Andalucismo Histórico también ha querido engrandecer la figura del cantante Carlos Cano, fallecido a finales del año pasado. 'Para nosotros era la voz de Andalucía', afirma el vicepresidente de la fundación Blas Infante, que también ha querido recordar en esta edición al escritor Gerald Brenan. Pedro Ruiz señala al escritor británico como un personaje vital para Andalucía al haber acumulado una vasta biblioteca que 'no debe ser perdida, que debe usarse'.

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