DRÁCULA, EL AMERICANO
Los rumanos, que esperaban arrasar utilizando al Conde Drácula, su paisano más famoso, como tema central de un parque de atracciones, han recibido una noticia que les dejó la sangre helada. Según informa la BBC británica, el Gobierno de Bucarest descubrió que los derechos sobre la imagen del legendario vampiro no están en sus manos, sino en las de un estudio hollywoodense. Además de ser escalofriante, el hallazgo implica que, para crear Draculandia, Rumania deberá pagar derechos de autor a Universal Studios, que entre 1930 y 1960 filmó siete películas sobre el famoso personaje. Drácula fue creado en 1897 por el novelista Bram Stoker, que se inspiró en Vlad Tepes, uno de los hombres que gobernó Transilvania en el siglo XV, cuya imagen cubrió de terror. Pero el mito de Drácula con capa negra, piel blanquísima y afilados colmillos para clavarlos en inocentes cuellos femeninos, creció a través de las pantallas cinematográficas más que del mundo literario. Y, gracias a las películas, cerca de 250.000 turistas viajan cada año a Transilvania para descubrir los misterios del castillo Bran, más conocido como el castillo de Drácula.-
