Detenidos tres rumanos por el asesinato de un compatriota

Tres ciudadanos rumanos han sido detenidos en Marbella (Málaga) acusados de matar a puñaladas a un compatriota, Adrián D., de 29 años, el pasado 26 de septiembre en Madrid. El asesinato pudo deberse a un ajuste de cuentas por asuntos relativos a la prostitución, según informó ayer la Jefatura Superior de Policía de Madrid. Los detenidos son Ciprian Mohail T., de 34 años; Dorel Inocentiu H., de 29, y Alina I., de 21, acusada de encubrimiento.

Los hechos ocurrieron el pasado 26 de septiembre frente al número 3 de la calle del Conde de Romanones, en el distrito Centro de Madrid, donde fue encontrado el cuerpo sin vida de Adrián D.

Agentes de policía observaron un charco de sangre que recorría la calle y llegaba hasta la puerta de una cafetería de Tirso de Molina donde, según un testigo, dos hombres se habían introducido en un coche blanco aparcado enfrente.

Otro testigo avisó a la policía de que un coche blanco, cuya matrícula pudo facilitar, circulaba por la calle de Atocha con las puertas manchadas de sangre.

Las investigaciones determinaron que el automóvil pertenecía a una empresa de Marbella y que había sido alquilado el pasado 21 de septiembre, por lo que se estableció un dispositivo de búsqueda en la localidad malagueña. A mediodía del pasado sábado, los investigadores localizaron el coche cuando estacionaba frente a la empresa de alquiler, y sus tres ocupantes fueron detenidos poco después.

Dorel Inocentiu llevaba en ese momento un jersey y un pantalón con manchas de sangre, y tenía una herida de arma blanca en el antebrazo izquierdo que, según el examen forense, le había sido causada tres o cuatro días antes. Además, en el coche había gran cantidad de manchas de sangre que los presuntos homicidas habían intentado limpiar sin éxito.

Los detenidos se negaron a prestar declaración, aunque las investigaciones apuntan a un ajuste de cuentas por asuntos relativos a la prostitución como probable causa del asesinato de su compatriota.

Ciprian Mohail ha estado detenido en dos ocasiones por este tipo de delitos, además de otros relativos a los derechos de los trabajadores y contra el patrimonio, mientras que Dorel tiene antecedentes por lesiones y resistencia. Alina I., sin antecedentes en España, tiene prohibida la entrada en Italia.