El Ayuntamiento empleó una hora en cerrar anoche todas las puertas del parque del Retiro

Por primera vez en su historia de parque público, el Retiro durmió ayer con sus puertas cerradas. Los operarios de una empresa privada tardaron una hora, desde las once a las doce de la noche, en precintar las entradas del parque. En gran parte de las puertas necesitaron usar candados, porque las cerraduras estaban taponadas con silicona colocada 'por algunos' que están en contra del cierre, según la policía. Los agentes patrullaron, desde las 22.00, alertando con equipos de megafonía sobre el cierre inminente del parque a las personas que se encontraban dentro.

Los dos empleados de la empresa Eulen comenzaron a cerrar el Retiro por la Puerta del Ángel, la que está pegada a la Cuesta de Moyano. Y, siguiendo el sentido de las agujas del reloj, fueron cerrando después, una a una, 17 de las 18 entradas del parque. Sólo quedó una abierta -la entrada de Infanta Mercedes, enfrente de la calle Ibiza- que permaneció abierta hasta que terminó el espectáculo de la sala de fiestas Florida Park.

Miembros de la Patrulla Verde -grupo especializado de la Policía Municipal que persigue los delitos ecológicos y se encarga de vigilar los parques- alertaron desde por la tarde a los mendigos e indigentes que duermen en el Retiro de que anoche se iba a cerrar el parque. El jefe de esta patrulla, José Luis Montero, aseguró a las doce de la noche: 'Ya no queda nadie dentro. Si hay algún mendigo, debe de estar muy escondido, en áreas muy difíciles de rastrear'.

Sólo algunos deportistas que hacían footing a las once de la noche protestaron por tener que abandonar el parque. Uno de ellos, que llegó a medianoche en pantalón corto dispuesto a correr por el Retiro, se encaró a un agente en la puerta de la plaza de la Independencia, porque no le dejaba pasar. 'Pero no ha habido ningún problema, todo el mundo se ha ido sin oponer resistencia', explicó Montero. También, a las 23.30, quedaba en el parque un grupo de jóvenes tocando la guitarra, que aceptaron de buen grado la indicación de la Policía Municipal. Según los agentes, a las once de la noche sólo había en el parque '40 o 50 personas, todo lo más'.

Con todo, el parque no quedará completamente sellado. En la Puerta del Ángel Caído habrá siempre un coche de la Policía Municipal, con el juego de llaves necesario para abrir cualquiera de las puertas por si hay una emergencia o por si alguien se queda atrapado.

La intención del Ayuntamiento es preservar el parque de actos vandálicos y mejorar la seguridad del Retiro. 'Por la noche es cuando se producen más actos salvajes: bancos quemados, estatuas rotas, setos destrozados, son actos típicos de borrachos que por fin se evitarán', precisó un técnico municipal.

El único problema con que se toparon los empleados de Eulen fue que buena parte de las cerraduras estaban llenas de silicona, 'Alguien que no estaba a favor de la medida de cerrar el parque ha sido el culpable', afirmó un policía. Los empleados de Eulen estaban preparados para esto, ya que llevaban candados por si fallaban las cerraduras.

El horario del cierre del parque será el siguiente: excepcionalmente, durante el mes de octubre se cerrará a las 23.00 y se abrirá a las seis de la mañana. A partir de noviembre, el Ayuntamiento aplicará ya el horario de invierno: las puertas se cerrarán a las diez de la noche (la apertura permanece invariable). Y el próximo mayo entrará en vigor el horario de verano: el Retiro permanecerá abierto de seis de la mañana hasta la medianoche.

La idea de cerrar el parque del Retiro por la noche no es nueva: el equipo de Gobierno municipal, del PP, lleva años detrás de ello. Pero para eso era necesario, en primer lugar, completar la verja que rodea el recinto -una operación que no ha estado terminada hasta hace unos meses- y, por otro, asegurarse de que los vecinos iban a aceptar la medida. El concejal de Medio Ambiente, Adriano García-Loygorri, encargó una encuesta a principios de año según la cual el 70,9% (de 800 vecinos preguntados) está de acuerdo con el cierre nocturno por motivos de seguridad.

El sondeo recoge que un 58,6% de los encuestados manifestó que creía que el parque ya se cerraba por la noche. Sólo el 2,5% de los residentes encuestados, la mayoría vecinos de las zonas próximas al parque, aseguró ir al parque por la noche.

El Ayuntamiento ha instalado carteles en cada una de las 18 puertas del parque con los horarios de cierre y ha enviado cartas firmadas por García-Loygorri y por la concejal presidenta de Retiro, Dolores Navarro, para informar a los vecinos del distrito de la nueva situación.

Hasta 1968, los jardines del Retiro se cerraban a los usuarios a la caída del sol, cierre que efectuaban los vigilantes del parque, que multaban con cinco pesetas a quienes permanecían dentro después del cierre.