Todo listo para la inauguración

Le pregunto a Josep Montanyès el significado de las frases de Fabià Puigserver grabadas en el bronce. 'Creo que lo que hizo grande el Lliure fue, precisamente, esta idea de Fabià, una idea que él llevaba a las últimas consecuencias. Las frases las escribió durante una crisis con las administraciones, en 1989'.

¿Se han resuelto todos los problemas? 'Durante las fases de construcción no hubo ninguno. Todo ocurrió al acabar. Lo que está claro es que ésta no es una estructura barata de funcionamiento. En el momento en que dimití, yo era una persona desesperada que veía cómo todo se hundía. El apoyo de la profesión y de los medios me sorprendió, y mucho; ha sido un apoyo importantísimo para hacer cambiar las opiniones que corrían dentro de las administraciones. Y en este momento la libertad es absoluta'.

Vuelvo a los fantasmas. 'Lo que a mí me gustaría', afirma Montanyès, 'es poder traerme a los fantasmas del Lliure de Gràcia. Tenemos detrás 25 años de historia, y está el público. Tenemos que cambiar muchas cosas, pero no el espíritu. Abrirnos a la gente joven. Tienen que repetirse los amores y desamores, los momentos de histeria, los nervios, eso es lo que creará el clima. Hay que habitar el espacio'.

También Joan Ollé corre por el teatro. Es el responsable de la sala pequeña, donde este año actuarán José Sanchis Sinisterra, Jordi Mesalles, Franco di Francescoantonio y Xavier Albertí. 'Lo que yo hice', señala Ollé, 'fue presentar una propuesta que incluyera actividades de tarde, noche y medianoche. Por la tarde, reflexión, debates en torno a lo que se programe en la sala grande, pero también puede haber conferencias, talleres, lecturas o conciertos. Por la noche, habrá espectáculos desesperadamente esenciales, de pocos actores y menos medios, siempre que esta esencialidad no perjudique al espectáculo. Por la noche, espectáculos ligeros. Lo que me gustaría es que fuese el punto de encuentro de la profesión y el público, cuando ya todas las salas de la Ciutat del Teatre hayan cerrado'. En definitiva, todo está listo para la inauguración.