Tumbar al gigante inglés

Casi nada para el Deportivo: su triste debut europeo de la pasada semana le obliga a tumbar a un gigante esta noche en Riazor (20.45, TVE 1; y 22.45, Canal +, en diferido). '¿Quién le preocupa más del Manchester United?', le preguntaron ayer a Javier Irureta. 'Todos... hasta el utillero', respondió el técnico deportivista con sorna. No es el equipo de sir Alex Ferguson, desde luego, el mejor rival para buscar una victoria inaplazable, pero el Deportivo se ha abocado a esa penitencia tras su empate de hace siete días con el Olympiakos en Riazor. Un nuevo fracaso ante el Manchester comprometería gravemente el futuro del equipo gallego en la Liga de Campeones.

Antes de partir para A Coruña, Ferguson demostró que conoce bien la leyenda de Riazor. 'El Deportivo es tan fuerte que en los últimos tres años sólo ha perdido cinco partidos en casa', recordó el preparador británico. Pero también es verdad que el mito de la invulnerabilidad de Riazor anda un tanto alicaído últimamente, tras el empate con el Olympiakos y la derrota en la Liga ante el Athletic. 'Esperemos que se haya cubierto ya la cuota de fallos en casa para esta temporada', dijo ayer Fran para echar tierra.

La victoria del sábado en Mendizorroza, un estadio que llevaba cinco años resistiéndosele a los deportivistas, ha tenido efectos tranquilizadores, pero no ha disipado todas las dudas. De nuevo el Deportivo no supo administrar un marcador favorable, y sólo un error arbitral impidió al Alavés remontar por segunda vez. Pero tampoco es que el Manchester esté a salvo de dudas. Al cuadro de Ferguson le ocurre algo parecido a lo que le pasaba al Madrid: por alguna extraña razón, gana con más comodidad cuando no están sus grandes fichajes de la temporada (el argentino Verón y el holandés Van Nistelrooy). Su marcha en la Liga era bastante discreta hasta que el sábado Ferguson decidió reservar a los futbolistas teóricamente mejores para Riazor. En el equipo titular sólo figuraban dos jugadores habituales (Barthez y Keane), y el United arrolló al Ipswich Town (4-0) en Old Trafford.

En la plantilla del Manchester hay quien cree que la llegada de jugadores como Verón o Blanc ha reblandecido el carácter del equipo y cambiado su estilo. A los más identificados con los tradicionales valores británicos, como Roy Keane, no les hace ninguna gracia. 'Tenemos que ser más aburridos', sentenció días atrás el centrocampista irlandés, cuya vieja jerarquía en el equipo sufre la amenaza de la llegada de Verón. Si la defensa ya fue tradicionalmente el punto débil del Manchester, la venta de Stam al Lazio -una decisión disciplinaria de Ferguson también cuestionada en el vestuario; 'el técnico me ha tratado como un animal', dijo ayer el propio Stam- ha reabierto el debate. A su sustituto, el veterano Blanc, le llovieron las primeras críticas tras la derrota de hace una semana en Newcastle (4-3). Además, Ferguson no podrá disponer esta noche del joven internacional inglés Wes Brown, casi con puesto fijo en el centro de la zaga y que se quedó en casa por una lesión.

Irureta no oculta una cierta fascinación por el Manchester, 'un plato que el público de aquí no está acostumbrado a degustar a menudo'. Para que no todo fueran genuflexiones ante el adversario, el técnico recordó que en las dos últimas campañas otros dos equipos ingleses visitaron Riazor -Arsenal y Leeds United- y ambos salieron derrotados. Irureta no pudo recuperar al lesionado Víctor, un futbolista que se está convirtiendo en indispensable: cada vez que falta, la banda derecha se desequilibra sin remedio. Para salir del paso, el técnico probablemente recurrirá a situar a Makaay en el extremo en lugar de Scaloni, zarandeado por el público en las últimas fechas.

Deportivo: Molina; Manuel Pablo, Donato, Naybet, Romero; Emerson, Mauro Silva; Makaay, Valerón, Fran; y Tristán.

Manchester United: Barthez; Gary Neville, Johnsen, Blanc, Silvestre; Beckham, Keane, Verón, Giggs; Scholes y Van Nistelrooy.

Árbitro: Braschi, italiano.