El Consell reclama la última palabra sobre la planta regasificadora
Encovagás evita la convocatoria del consejo
La batalla que libran Iberdrola y Unión Fenosa para ganar la autorización administrativa preceptiva para construir una planta regasificadora de gas licuado en la Comunidad Valenciana -la primera, en Castellón, y la segunda, en Sagunto,- no se resolverá al margen del Consell, que reclamó ayer, por boca de su presidente Eduardo Zaplana, la última palabra y recordó su competencia exclusiva en materia energética.
Zaplana replicó con un tajante 'no me consta' a una pregunta sobre un posible acuerdo entre ambos gigantes de la energía en torno al destino definitivo de la planta regasificadora. Más aún, el presidente comentó que 'sería un error plantear' cualquier negociación al respecto 'al margen de la Administración autonómica'.
La Generalitat tiene la competencia exclusiva en materia de planificación energética en la Comunidad Valenciana y debe optar entre dos propuestas similares.
Unión Fenosa se adelantó a presentar un proyecto para construir una planta regasificadora en el Puerto de Sagunto, como parte de un ambicioso plan de desarrollo de un polo energético que prevé la instalación de tres centrales térmicas de ciclo combinado alimentadas por gas. El proyecto se tramita desde hace casi un año.
La compañía que preside José María Amusátegui ha cerrado acuerdos para importar gas licuado desde Egipto y tenía previsto regasificarlo en Sagunto, el puerto español más próximo.
Iberdrola avanzó su interés por construir una planta idéntica poco después, pero el proyecto sólo fue oficialmente presentado a principios del verano. La compañía que preside Íñigo Oriol construye en la actualidad un central térmica de ciclo combinado en el Grau de Castellón, donde ya explotaba otra central alimentada por fuel.
La Generalitat impulsó la pasada primavera la constitución de la empresa Encovagás, para planificar las necesidades energéticas de la Comunidad Valenciana en materia de gas y, esencialmente, decidir la ubicación idónea de la planta.
Participan en Encovagás la Generalitat Valenciana, Bancaixa, la CAM, la patronal del sector del azulejo Ascer y la propia Iberdrola. Según fuentes de la Generalitat, Unión Fenosa fue invitada a sumarse a la sociedad semipública, pero declinó el ofrecimiento.
La incertidumbre sobre el destino de la planta regasificadora se mantiene ante la ausencia de convocatoria del consejo de Encovagás que debe tomar la decisión. Además, fuentes de Iberdrola negaron ayer cualquier negociación privada al respecto con Unión Fenosa.
