'Hay que jugar sin miedo'

Atormentado por su mal partido contra el Rayo Vallecano en la Liga y torturado por las lesiones, sobre todo las de Rivaldo y Overmars, el Barcelona aguarda hoy con gran recelo al Olympique de Lyón (Camp Nou, 20.45, Canal + y Vía Digital; TVE-1, 22.45, en diferido) en la apertura de la Liga de Campeones. Pese a que las malas noticias se le acumulan y el recuerdo de la eliminación en el curso pasado pesa mucho, el Barça se exige la victoria en los tres partidos del Camp Nou, así que esta noche no le queda otro remedio que ganar al equipo francés, tercero en su Liga después de seis jornadas disputadas.

El técnico azulgrana, Carles Rexach, trabaja a contracorriente. 'Todavía no he podido hacer lo que pretendía a principio de temporada', argumentó para explicar los motivos por los que el Barça todavía no tiene un estilo de juego definido al sufrir tantas bajas que no ha podido casi ni alinear al tridente (Rivaldo, Kluivert y Overmars) ni optar por los extremos (Geovanni y Overmars). 'El holandés continúa con molestias', prosiguió; 'el dolor ha remitido, pero le falta confianza. Soy pesimista respecto a Rivaldo. Ojalá me equivoque, pero no creo que reaparezca antes de un mes'.

Rivaldo será sometido a varias pruebas en las próximas horas y mañana se decidirá si es necesario intervenirle de su lesión en la rodilla izquierda. Alrededor de su lesión hay tres diagnósticos distintos. Uno de ellos -el del jefe de los servicios médicos del club, Josep Borrell- no descarta la operación. 'Lo que tiene Rivaldo es más grave de lo que parecía', insistió Rexach, recordando la relación de bajas: Abelardo, De Boer, Dani, Gerard y Reiziger también están en la enfermería. 'Ya me veo tapando agujeros otra vez para confeccionar una alineación. No es normal que tengamos tantos lesionados cuando acabamos de empezar'.

Privado de Overmars y Rivaldo, dos de los jugadores que consideraba claves para combatir al Olympique de Lyón, Rexach deberá volver a jugar con un sólo extremo, Geovanni, incluido en la lista pese a que sufre una distensión en un hombro. Igualmente infiltrado jugará Luis Enrique, que se recupera de un golpe en las costillas. El asturiano incluso podría desplazarse al flanco izquierdo para que el equipo tuviera más proyección ofensiva. La recuperación de Gabri, ausente en la Liga por sanción, y la convocatoria de Trashorras, enganche del filial, ayudaron a completar el plantel, que se ha concentrado en El Muntanyà, santurio del dream team, para preparar a fondo el encuentro.

'Soy consciente de que no podremos jugar como pretendemos', concluyó Rexach; 'nos movemos en un término medio: no tenemos al tridente ni tampoco a los dos extremos, por lo que siempre estamos a medias, y así es difícil adquirir los automatismos del juego. Pero invito al equipo a que juegue suelto, sin miedo; a que la pelota circule rápida, a que profundicemos por las bandas y el pase no sea de estación en estación, sino que tenga fuerza para traspasar las líneas. O jugamos rápido o no superaremos al Lyón, un equipo que se tapa muy bien, agresivo defensivamente y rápido en el contraataque'.

La baja del ex azulgrana Andersson y el traspaso de Marlet al Fulham no han rebajado el potencial del equipo de Jacques Santini. Tercero en la Liga, el Lyón cuenta con futbolistas de nivel como el portero Coupet, el central Edmilson, el lateral Brechet, el ex atlético Juninho y el zurdo Carrière.

Barcelona: Bonano; Puyol, Christanval, Andersson, Sergi; Rochemback, Xavi, Cocu; Geovanni, Saviola y Luis Enrique.

Olympique de Lyón: Coupet; Deflandre, Edmilson, Müller, Brechet; Juninho, Carrière, Foe, Laigle; Nee y Layindula.