El órgano regulador de las telecomunicaciones fuerza a La Caixa a abandonar el consejo del operador Xfera

La Caixa ha tirado la toalla en su determinación por mantener intactas sus participaciones en el sector de telecomunicaciones. Forzada por la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT), que consideraba 'incompatible' su presencia en Telefónica Móviles (a través de Telefónica) y en el operador de móviles Xfera (a través de la concesionaria de autopistas Acesa), la primera caja de ahorros española ha optado por abandonar una posible intervención indirecta en la gestión de Xfera.

Lluís Deloufeu, único representante de Acesa en el Consejo de Xfera, formalizó a finales del pasado mes de agosto su renuncia al cargo de consejero, según confirmó ayer La Caixa. La entidad financiera controla un 31,7% del capital de Acesa, que, a su vez, tiene un 5,7% de Xfera. Antes de la última ampliación de capital de la operadora de móviles, en la que no participó, Acesa poseía un 7,1%. Fuentes de esta empresa dijeron que 'no se plantea' reducir aún más su parte actual.

Las condiciones impuestas por la CMT no sólo incluyen el abandono del Consejo, sino que limitan el ejercicio de derechos de voto de La Caixa (a través de Acesa) en las juntas de accionistas de Xfera hasta un 3%, aunque su participación sea del 5,7%.

La Caixa siempre mantuvo que su posición en el sector era 'correcta' porque 'no tiene la mayoría ni del accionariado ni en el Consejo de Acesa'. Sin embargo, la CMT veía una incompatibilidad entre su presencia indirecta en Xfera y el 3,6% que La Caixa controla en Telefónica, donde, además, tiene en el Consejo a su director general, Isidre Fainé, y a su director general adjunto, Antoni Massanell. La caja también avanzó, desde un primer momento, que, si no convencía con sus argumentos al órgano regulador, acataría sin problemas su decisión. 'Así ha sido, hemos cumplido', señaló un portavoz.

Interpretación de la norma

Por su parte, la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones también 'da por cerrada esta carpeta', que se arrastró más tiempo del previsto por las diferentes interpretaciones que los consejeros de la CMT hacían del artículo 34 del Real Decreto aprobado por el Gobierno en junio de 2000, en virtud del cual ninguna empresa puede tener más del 3% en más de un operador de entre los que lideren un mismo mercado. Fuentes de la Comisión calificaron ayer de 'normativa poco clara' este artículo.

La interpretación del caso Caixa sienta un precedente en la investigación por la CMT del enmarañado cruce de participaciones de otras compañías y bancos en el sector, que sigue adelante.

El órgano regulador ha recabado 'información confidencial' sobre otras participaciones de la entidad financiera en el sector, no problemáticas porque no superan el 3%. La Caixa siempre insinuó que su preferencia, de verse forzada a elegir, sería Telefónica, donde, en el pasado, su histórica participación le generó grandes plusvalías.

Hace unos meses, su 3,6% en Telefónica superaba de largo en valor el billón de pesetas. En pleno vendaval bursátil, hoy vale cerca de 331.200 millones.