Rol de premiados
El tema de los premios literarios en la situación de la literatura escrita en este país, en euskara o en castellano, es espinoso. Desde luego, no tienen el eco mediático que la concesión de cualquier galardón consigue en otras latitudes o en otros sistemas literarios. A veces, la distribución de los libros que se publican tras el premio no resulta la adecuada. Los libros colectivos, a no ser que se centren en un tema único (cuentos de escritoras, cuentos sobre el ciclismo, sobre el boxeo), tampoco son del agrado de los lectores, que prefieren acostumbrarse a un registro y seguirlo que variar en cada sección de autor y estilo.
A pesar de las dificultades evidentes, la proyección de la literatura nueva a través de los premios sigue un camino recto y decidido. Félix Maraña organiza y publica los premios Iparragirre Saria, creados por los ayuntamientos de Urretxu y Zumárraga. Son unos galardones de larga trayectoria, han traspasado la decena de convocatorias, y siguen en su objetivo de 'dar voz a nuevos valores literarios'.
Acaba de aparecer el volumen que recoge las obras premiadas en 2000, trabajos de Virginia Araya (primer y tercer premio en poesía), José Luis Etxeberria (segundo premio de poesía) y Alfredo Lope Echazarreta y Elena Abalos (primer y segundo premio en narrativa). Al lector le queda la duda de cuál será la trayectoria futura de los autores premiados. Desde luego, eso no depende de los organizadores del evento.
Registros
Cada autor seleccionado o autora premiada posee su registro, y aquí tenemos más que voces claras, tendencias dominantes en la escritura, a veces autodidacta, de estos creadores. Algunos repiten premio, o reaparecen en las nóminas de los premiados en años anteriores, hecho que, quizás, pudiera corregirse. En poesía siguen en activo escrituras que van desde la reflexión y la evocación en un lenguaje modernista de los tiempos de la infancia al intento de realismo sucio; en narrativa, quizás se encuentra en este género lo más atrayente del volumen, se equilibra entre el absurdo, el terror y el humor, siempre con una voluntad de estilo que se muestra correcto.
El esfuerzo editorial se ve reforzado por la presentación del curriculum de los autores, salvo en el caso de la ganadora del premio de poesía.
Varios autores: Iparragirre Saria 2000. Bermingham Edit. San Sebastián, 2001. 109 páginas, 750 pesetas.
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