La compañía mixta Jaizkibel anuncia que intentará desfilar en el Alarde de Hondarribia por sexto año consecutivo
La compañía mixta Jaizkibel no desiste en su empeño de desfilar en el Alarde de Hondarribia, acto festivo que conmemora el levantamiento del sitio francés en 1638. Lo intentará el próximo 8 de septiembre por sexto año consecutivo, con la incertidumbre de si podrá o no conseguirlo. Este es, al menos, el propósito anunciado ayer por portavoces de la formación y de la asociación Juana Mugarrietakoa, que denunciaron el 'fraude de ley' que impera en la localidad e instaron al alcalde de la misma, Borja Jáuregui, del PNV, a no autorizar un desfile 'discriminatorio'.
La situación a la que se enfrenta Jaizkibel ha variado muy poco con respecto al año pasado. Con una salvedad: el desfile, organizado por Alarde Fundazioa, ya no se rige bajo el derecho de reunión y manifestación, sino por la ley de Espectáculos Públicos. Por lo tanto, ya no es el Departamento vasco de Interior quien estipula el horario y el recorrido. La concesión o denegación del permiso para celebrar el desfile de armas compete ahora al alcalde de la localidad, que tiene de plazo hasta el próximo día 5 para resolver la cuestión.
La ararteko en funciones, Mertxe Agúndez, se dirigió a Jáuregui por escrito recientemente para recordarle que 'el respeto a la legalidad y, en especial a los derechos humanos, quedaría garantizado si se explicita en el acuerdo autorizante la condición legal de no discriminar a las mujeres que deseen participar en el Alarde', es decir, si se exige que no se impida la incorporación de la compañía mixta a dicha celebración. 'Si autoriza un acto discriminatorio sería prevaricación', dijo la portavoz de Jaizkibel, Rosario Iraola. Y ya anunció que, en ese caso, el colectivo recurriría el acto administrativo judicialmente y pediría incluso medidas cautelares, como ocurrió en Irún el pasado 30 de junio.
De momento, no hay constancia que los organizadores del Alarde hayan tramitado la petición ante el Ayuntamiento. No obstante, la compañía mixta sí que ha contactado por escrito con la Junta del Alarde, organizadora de la marcha, para conocer qué lugar le corresponde en el desfile. 'Se nos ha contestado que nos dirijamos a sus abogados'.
La situación del Alarde apenas ha variado desde que se recrudeció la polémica en 1996. Los vecinos siguen sin aceptar que las mujeres participen en el acto en igualdad de condiciones que los hombres. En la marcha desfilan cada año unos 4.000 hombres y sólo 19 mujeres como cantineras, y Jaizkibel. El año pasado la Ertzaintza no pudo hacer cumplir una resolución del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco que exigía que se garantizara la presencia de las mujeres en la marcha por temor a que se produjeran alteraciones del orden público.
