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Vecinos de Orcasitos piden al Defensor del Pueblo que se oponga a la instalación de una torre eléctrica

Los residentes sostienen que los cables de alta tensión 'causan cáncer'

Un grupo de vecinos de Orcasitas (Usera) ha salido a la calle a protestar por la instalación, a 52 metros de sus viviendas, de una torre eléctrica de alta tensión que debe ser trasladada desde una zona cercana donde se van a construir pisos nuevos. Los residentes no piensan volver a sus hogares hasta que la empresa constructora Prasa detenga las obras. Unos 80 residentes paralizaron ya el pasado lunes los trabajos que se llevaban a cabo para asentar los cimientos. Un portavoz de la asociación de vecinos la Meseta de Orcasitas aseguró que hoy se dirigirán por escrito al fiscal de Medio Ambiente, Emilio Valerio, y al defensor del Pueblo, Enrique Múgica, para expresar su rechazo al traslado de la torre.

Los obreros que levantaban la torre se han retirado por el momento. Pero los residentes no se fían y exigen que la empresa renuncie definitivamente a la construcción. No va a ser fácil. El edil del distrito, Carlos Izquierdo, del PP, señaló que la empresa constructora cuenta 'con todos los permisos y la legalidad está de su parte', y confió en que 'los vecinos depongan su actitud'.

Éstos replican que no lo van a hacer. 'Aquí vamos a quedarnos, en la calle, hasta que estemos seguros de que no nos ponen la torre al lado de nuestra casa', explicaba ayer un vecino visiblemente enfadado. Otros residentes confeccionaban pancartas que decían 'Las torres eléctricas matan'. 'Las estamos haciendo de nuevo [las pancartas] porque anoche [por la madrugada de ayer] unos barrenderos que no eran del barrio, por orden del Ayuntamiento, las retiraron', relataban.Las intenciones de la constructora son las de trasladar ocho metros una torre de alta tensión ya existente de manera que quedará enclavada en la calle de Alzola, a 52 metros de un bloque de viviendas. Los vecinos consideran esto un 'insulto' y 'la gota que colma el vaso', ya que el barrio entero de Orcasitas está plagado de torres de alta tensión y ni el Ayuntamiento ni la Comunidad ha presupuestado nunca ni un duro para enterrarlas.

La actual torre estorba para los futuros planes de la constructora, ya que queda en un esquinazo de una de las parcelas que albergarán las 1.200 viviendas previstas. Esta torre no es la única que molestaba a la constructora, que ya se ha comprometido a enterrar otras 20, con un gasto de 1.500 millones de pesetas. 'Estas 20 torres quedan lejos de nuestras viviendas, en unos descampados', dice un vecino de Orcasitas. 'Es lógico que las quiera enterrar: nadie va a querer comprar una casa nueva con cables de alta tensión al lado. Pero, en el caso de esta torre en concreto, la de la calle de Alzola, como la pueden apartar, pues la apartan, porque es mucho más barato, sin importarles que sufran las consecuencias los vecinos que ya viven aquí desde hace años', señala el presidente de la Asociación de Vecinos La Meseta de Orcasitas, Félix López Rey, ex concejal de Izquierda Unida en el Ayuntamiento.

Los vecinos de Orcasitas creen que la cercanía de los cables de alta tensión a las viviendas puede producir cáncer. 'No es algo que nos inventemos nosotros, es que nos lo han dicho los médicos', explicaba ayer María Díaz, de 57 años, que llegó a Orcasitas hace más de 20. 'De un bloque de 40 vecinos que está al lado de una de las torres, 16 tienen cáncer. Yo misma he sufrido un tumor cerebral', añade esta vecina.

En febrero de 1998, el fiscal de Medio Ambiente del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, Emilio Valerio, dio instrucciones a la Comunidad y al Ayuntamiento para que, en el plazo de cuatro años, eliminaran las líneas de alta tensión que atraviesan Usera, por su riesgo para la salud. 'La escasa distancia entre algunas de las líneas y las viviendas requiere la inmediata intervención de las autoridades públicas', especificaba el fiscal.

A cuatro calles de la polémica torre que ha sublevado a los vecinos existe una biblioteca pública por la que sobrevuela, a menos de tres metros, un cable eléctrico de alta tensión. 'Por eso nos ha cabreado tanto que ahora, encima, quieran trasladar esa torre a la calle de Alzola. Llevamos años pidiendo que retiren las torres de alta tensión que están cerca de las casas, y para una vez que tocan una es para acercarla más a las viviendas que ya están ocupadas', añade Félix López Rey.

El concejal del distrito considera que la empresa constructora 'ha hecho un favor a los vecinos, porque van a enterrar 20 torres, y, además, el traslado de la de la calle de Alzola por un lado es necesario y por otro provisional'. El enterramiento definitivo de la instalación dependerá, como el de todas las demás de Usera, de la firma de un convenio especial entre el Ayuntamiento, la Comunidad y Unión Fenosa, responsable de las torres, y para él será necesario un desembolso de miles de millones de pesetas.

'Nos toma por tontos'

'El concejal del distrito nos toma por tontos', protesta López Rey. 'Y aquí no somos tan tontos como él cree. ¿Cómo puede tener la desfachatez de asegurar que la torre va a ser provisional? Llevamos años esperando ese famoso convenio que nunca llega', añade el edil.

Rafael Simancas, portavoz del PSOE en el Ayuntamiento, adelantó ayer que su grupo solicitará en un próximo pleno municipal que el soterramiento de líneas eléctricas en Orcasitas 'se convierta en un tema prioritario para el municipio'. Simancas no alberga dudas sobre el carácter del traslado de la torre a la calle de Alzola: 'Responde puramente a intereses especulativos', sentencia.

'La puerta da calambre'

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