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CULTURA Y ESPECTÁCULOS

Imago ofrece una antología alternativa del arte visual español

La dimensión alternativa, que junto al sello de independencia, ha caracterizado la trayectoria del festival de fotografía Imago, en Salamanca, ha destacado especialmente en su sexta edición. Este año la exposición ofrece una amplia muestra de creadores españoles a diferencia de ediciones anteriores en la que hubo mayor presencia de autores extranjeros.

Alberto Martín Expósito, coordinador de la muestra, destaca que Imago-2001 se planteó como 'una presentación de propuesta analítica de la creación española visual, en lo que puede ser una especie de antológica, pero que al mismo tiempo tiende a ser alternativa, que ha sido siempre la vocación de un festival con voz propia, diferenciado de exposiciones más masificadas'. La intención reside en 'reconocer un nivel de creación entre los autores españoles y ofrecerlo de forma razonada, tanto en la exposición como a través del libro editado, con edición bilingüe español-inglés, para proyectar en el exterior el momento creativo de esos autores, por lo que se ha realizado una edición especial amplia'.

Hasta mañana permanecerán expuestas las obras de Alicia Martí, José Álvaro Perdices, Silvia Martín y Xavier Ribas (salas de Torre de Abrantes), así como las de Carmela García (sala del patio de Escuelas). Prácticamente toda esa misma obra se mostrará en la localidad portuguesa de Maïa entre el 26 de octubre y el 18 de noviembre próximos, aprovechando la cercanía con Oporto, y su condición actual de ciudad europea de la cultura.

La creación en España

En función del eco que ha levantado la muestra, Martín Expósito afirma que se ha tratado de 'abrir líneas de trabajo, a modo de laboratorio de identificación con respecto a la producción creativa visual española. Lo cual no es igual a un escaparate'. También se ha identificado a una generación de creadores, que, a pesar de la no coincidencia de edad en muchos casos, sin embargo, permite advertir claves y ritmos de creación en España con suficiente representatividad, aunque se echen en falta algunos autores. 'Precisamente, la problemática se ha reconocido porque faltan determinados creadores, lo que ocurre porque no se ha ido a lo trillado y porque se ha trabajado con determinada orientación'. Según el coordinador, esa forma de trabajo es la que otorga a Imago su condición reconocida de festival independiente.

El libro editado, 'que supera al mero catálogo', se considera como una aportación valiosa para dar a conocer a los autores seleccionados, según Martín Expósito. El rigor de la publicación, junto con la claridad expositiva por su unidad artística y técnica, se apuntan como mérito persistente de Imago. Además, en el marco del festival se desarrollaron talleres y seminarios sobre aspectos como el retrato o la memoria del paisaje, entre otros.

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