El niño marroquí raptado en Crevillent debe dinero por pasar el Estrecho

La Guardia Civil continúa buscando a un grupo de marroquíes que presumiblemente secuestró durante la madrugada del pasado lunes a un menor de ese mismo origen, de 13 años, en Crevillent (Alicante). Fuentes cercanas a la investigación afirman que ya hay un sospechoso: un inmigrante magrebí residente en la localidad que todavía no ha sido localizado.

Además, se trabaja sobre la hipótesis de que el menor pertenecía a un contigente de inmigrantes que cruzaron el Estrecho, aunque se desconoce la fecha y el lugar de llegada a la península.

La subdelegación del Gobierno situó ayer el lugar del secuestro en la localidad murciana de Lorca. Según un portavoz del organismo, todos los indicios llevan a pensar que los hechos ocurrieron allí, si bien la denuncia fue presentada en el cuartel de la Guardia Civil de Crevillente. Todo ello rodea el caso de cierta confusión.

Los secuestradores exigieron el pasado lunes a la familia del menor un rescate de 180.000 pesetas. Fuentes del instituto armado confirmaron ayer que la denuncia fue efectuada por la novia y el hermano del menor, los cuales ya residían en la localidad alicantina. Este último punto lleva a creer que la suma ha sido reclamada por un grupo mafioso que transportó al menor, como deuda por el servicio. Jamal Chaibi, delegado de inmigración de CC OO, reclamó ayer 'un mayor esfuerzo en la investigación' a la subdelegación del Gobierno. Según el representante sindical, se han producido otros casos de extorsión en la Vega Baja.

Por otra lado, la Asociación de Inmigrantes Marroquíes Alamal, manifestó ayer que 'esta clase de secuestros son consecuencia de la política de extranjería española', que favorece la proliferación de grupos mafiosos, según la asociación .