Muere el general Oreja tras un mes de agonía
Una bomba de ETA le causó graves quemaduras
Al atentado que dejó gravemente herido al general Justo Oreja siguió un mes exacto de silenciosa agonía, durante el cual la banda terrorista ETA continuó matando: tres personas murieron asesinadas desde entonces. Sobre el general de Brigada Justo Oreja Pedraza, de 62 años, también fue cayendo el olvido hasta que ayer murió en un hospital de Madrid, incapaz de recuperarse de las heridas que le dejaron el 50% de su cuerpo calcinado. ETA atentó contra él la mañana del 28 de junio, haciendo estallar una bicicleta de montaña cargada con cuatro kilos de dinamita colocada junto al portal de su casa. Otras 19 personas resultaron heridas.
El arzobispo castrense, José Manuel Estepa, pidió ayer en su funeral en Madrid: 'Hay que evitar la tentación de aprovechar la sangre de las víctimas para justificar tratos que llenarían de vergüenza a los pueblos de España'. En el acto, al que asistieron el presidente del Gobierno, José María Aznar, y el líder del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, le fue impuesta al general la Gran Cruz del Mérito Militar a título póstumo.
El Gobierno vasco emitió ayer un comunicado en el que condena expresamente 'a ETA y a sus asesinos. Quienes colocaron una bomba asesina en Madrid y quienes han cometido otros muchos asesinatos deben saber que sólo recaban el desprecio del conjunto de los ciudadanos.'
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