96 militares muertos desde 1973
Con el fallecimiento ayer del general Justo Oreja Pedraza en el hospital madrileño de La Paz, son ya 96 los militares asesinados por ETA desde que el 20 de diciembre de 1973 acabara con la vida del almirante de la Armada y entonces presidente del Gobierno, Luis Carrero Blanco en Madrid.
Desde el final de la tregua que la banda terrorista mantuvo entre septiembre de 1998 y diciembre de 1999, ETA ha matado a cinco militares. El primero fue el teniente coronel Pedro Antonio Blanco García que murió el 21 de enero de 2000 al estallar un coche bomba en la capital de España.
La ciudad donde ETA ha llevado a cabo más atentados contra el Ejército es Madrid, con 47 muertos. Uno de los más sangrientos tuvo como víctimas, sin embargo, a personal de la Armada; ocurrió en Vallecas el 11 de diciembre de 1995 cuando seis trabajadores civiles de la Armada murieron y otras 17 personas resultaron heridas en un atentado con coche bomba.
El rango más castigado por los terroristas ha sido el de teniente coronel, con 17 víctimas; seguido del de coronel, con 15, y el de teniente y comandante, con 11 cada uno. Asimismo, ETA ha matado a diez suboficiales y a siete miembros de clase de tropa. Además del almirante Carrero, dos vicealmirantes han muerto en atentados: el director de Política de Defensa Fausto Escrigas Estrada, en 1985 en Madrid, y Cristóbal Colón de Carvajal, en 1986.
También murieron tres generales de División, todos ellos en Madrid, y cinco generales de Brigada. Uno de los comandantes asesinados por ETA fue Ricardo Sáenz Ynestrillas, en 1986. Muchos de los miembros de tropa asesinados fallecieron cuando desempeñaban servicios como conductores o escoltas militares de rango superior.
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