'Los sindicatos tienen que adaptarse al nuevo escenario laboral'

Juan Manuel Nogales (Huelva, 1953) es un curtido sindicalista de CC OO de Euskadi que ha estado diez años al frente de la sección sindical de Unión Española de Explosivas (UEE). Ahora compagina su trabajo en la planta de UEE en Galdakao con la elaboración de un estudio sobre la participación de los trabajadores que está realizando en la empresa textil Narbaiza. Nogales critica que la participación de los trabajadores sólo se plantea desde la óptica de los beneficios que comporta a la empresa y no a los trabajadores y sostiene que los sindicatos no pueden seguir al margen del debate sobre los nuevos modelos de gestión.

Pregunta. ¿Qué beneficios aporta la participación de los trabajadores en la empresa?

Respuesta. El problema es que la participación de los trabajadores se está planteando, en un 90% de los casos, desde el punto de vista de los beneficios que aporta a la empresa. Yo, en cambio, quiero plantear el tema de la participación desde el punto de vista de lo que aporta al trabajador.

P. ¿Y cómo se logra que los trabajadores participen?

R. El trabajador no participa por decreto. El empresario tiene que repartir la propiedad y el poder. Hay que crear las condiciones sociolaborales de satisfacción que inciten al trabajador a aportar su creatividad y sus conocimientos para conseguir un objetivo consensuado y no impuesto. El trabajador tiene que verse compensado. Y no sólo en el salario, porque las motivaciones económicas tienen un límite; debe tener satisfacciones en el terreno socio-laboral y sentirse valorado por su aportación.

P. ¿Qué hace un sindicalista metido en estos 'fregados'?

R. Si el mundo evoluciona, el sindicato también tiene que evolucionar, no puede quedarse atrás, anclado en el modelo tradicional. En Euskadi hay unos 7.000 trabajadores en empresas que contemplan la participación de los trabajadores, un mundo laboral en el que los sindicatos están ausentes porque los trabajadores, cuando se sienten satisfechos, necesitan menos a los sindicatos y esto debería hacerles pensar.

P. ¿Por qué cree que los sindicatos permanecen al margen del debate sobre los nuevos modelos de empresa?

R. Todo lo que es nuevo provoca cierta inestabilidad, es humano, pero no es lo acertado. No estamos hablando de alterar el esquema tradicional de negociación colectiva, sino de introducir nuevos mecanismos a los convenios como la participación, la creación de espacios de libertad donde el trabajador pueda desarrollar su creatividad, su innovación y lograr mayor satisfacción en su trabajo. Cuanto antes llenen los sindicatos el espacio libre que están dejando, menos tiempo habrá para que se dé una mala utilización de la flexibilidad y para que la participación provoque abusos.