_
_
_
_
_
Reportaje:

Turbulencias en las ondas

Carlos Herrera y José Antonio Abellán se disponen a competir en la radio de tarde

Rosario G. Gómez

'No vamos a desvestir un santo para vestir otro'. La cadena radiofónica que gestiona la Conferencia Episcopal se inclina por imponer la cautela antes de moverle la silla a José Antonio Abellán, una de sus figuras en alza. La Cope pretende situar al inventor de El tirachinas en la programación de tarde para competir mano a mano con Carlos Herrera (Onda Cero) a partir del próximo mes de septiembre. Pero la intención de los directivos de la cadena es mantenerlo también despierto durante la noche.

La propia emisora de la Iglesia admite que estaría cerca del milagro el hecho de que Abellán continuara al mando de La jungla (el magazine matinal que conduce en Cadena 100) y en la oferta convencional presentara simultáneamente el programa de tarde y el deportivo de madrugada que sustituye a Supergarcía. En el seno de la Cope aseguran que la clave para el trasvase a la franja vespertina es encontrar un nuevo equipo que se haga cargo de La jungla.

Después de un año sabático a cuenta de Telefónica Media, Herrera ata los flecos para la temporada 2001-2002. A su nuevo puesto de trabajo pretende incorporar algunos de los colaboradores-comentaristas con los que ya compartió micrófono en Radio Nacional de España. Antonio Garmendia es uno de ellos.

Herrera ha tanteado también la posibilidad de atraer hacia su nueva empresa al tándem compuesto por Javier Capitán y Luis Figuerola Ferretti. Los versátiles humoristas optan, de momento, por permanecer en la antena de la radio pública.

A la hora de salir al aire, Carlos Herrera ha dejado claro su interés por realizar el programa en Sevilla, si bien estará en Madrid un día a la semana, siguiendo la misma fórmula de Luis del Olmo con Protagonistas, que habitualmente se difunde desde Barcelona.

Con Abellán, la Cope pretende atajar la pérdida de oyentes en la franja de tarde que, como si de una gota malaya se tratara, cae sobre la emisora de la Iglesia desde hace un lustro. Del liderazgo indiscutible ha pasado al cuarto puesto de la tabla de clasificación de la audiencia. Los datos del último Estudio General de Medios (abril-mayo de 2001) le otorgaban a La tarde de Cope 110.000 oyentes. En su última etapa este espacio ha estado a cargo de María José Navarro, que tuvo que hacerse con los mandos después de que María Teresa Campos dejara el año pasado de forma repentina la empresa. Ni siquiera esperó a que concluyera la temporada.

Herrera intentará recuperar el espacio perdido durante los dos últimos años por Onda Cero. Tras el despido -con alevosía y agostidad- de Julia Otero, la cadena no ha levantado cabeza en la banda horaria de tarde. Marta Robles, el relevo de Otero, deja 292.000 oyentes, poco más de la mitad de los que heredó.Ahora abandona el programa y también la cadena que le dió cobijo los dos últimos años. Vuelve a Antena 3.

Onda Cero confía en rentabilizar el multimillonario fichaje de Herrera e incrementar la audiencia de forma meteórica. Los ejemplos, sin embargo, no avalan esa hipótesis. En su paso de la Cope a Onda Cero, Supergarcía se ha dejado en el camino casi un tercio de sus seguidores.

Dominio de Gemma Nierga Para un medio caracterizado por la estabilidad de su rejilla, la incorporación de nuevos actores como Abellán y Herrera es todo un fenómeno. Aterrizarán en un escenario dominado claramente por La ventana, de Gemma Nierga, en la SER. Este programa alcanzó su mejor marca de audiencia la pasada primavera, al obtener 623.000 oyentes, casi tantos como los que suman tres programas que compiten con La ventana: Lo que es la vida (Nieves Herrero, en RNE), A toda radio (Marta Robles, Onda Cero ) y La tarde (María José Navarro, Cope).

Para jugar en el mismo espacio (radioléctrico), Onda Cero prevé utilizar la emisora en onda media que Radio España tiene en Madrid y difundir así el programa de Herrera en la misma banda de frecuencias que sus rivales.

La baza de la cobertura ha centrado precisamente las negociaciones entre Telefónica y Radio España. Onda Cero quiere alquilarle a su antigua aliada sus mejores emisoras (Madrid y Barcelona) para difundir sus principales programas (Protagonistas, A toda radio y Supergarcía).

La desaparición de Radio España como oferta generalista ha acarreado la supresión de casi 150 de los 208 puestos de trabajo de la empresa que gestiona el grupo Planeta. Algunos profesionales buscan nueva ubicación. Antonio Jiménez, por ejemplo, negocia su incorporación a los informativos de Televisión Española.

Carlos Herrera, a la izquierda, y Jose Antonio Abellán.
Carlos Herrera, a la izquierda, y Jose Antonio Abellán.

Territorio de mujeres

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_