Mafias que se anuncian en Marruecos

El tráfico de personas es un negocio tan rentable que ya invierte en publicidad. 'Se ha detectado', explica un informe interno de la Guardia Civil, 'que las redes que operan en Ceuta y área del Estrecho emiten y distribuyen propaganda en diferentes localidades de Marruecos, ofreciendo traslado a España, trabajo, alojamiento y documentación por un determinado importe, indicando un número de teléfono al que llamar en Ceuta para mantener contacto'.

Los que pican, y tras cubrir en patera su viaje a la península, 'son trasladados a algún lugar del campo donde son retenidos bajo amenazas de devolverlos a su país, obligándolos a ponerse en contacto con algún familiar, en Marruecos o en España, exigiéndoles para su liberación grandes cantidades de dinero'.

Durante los últimos días, muchas han sido las noticias sobre inmigrantes marroquíes secuestrados por sus propios compatriotas, aunque con intervención esporádica de españoles e incluso algún tunecino. Interior sostiene que, al igual que en el caso de la droga aprehendida, las cifras de inmigrantes secuestrados dan idea de la magnitud del problema. 'Si cogemos un kilo de hachís', sostiene un alto cargo, 'sabemos que otros muchos kilos han entrado por otro lugar, con los inmigrantes pasa igual: siempre pasarán más de los que interceptamos, siempre sufrirán abusos más de los que al final sabremos; se trata de gente que nunca podrá venir a denunciar, que sufrirá mucho antes de dar el paso'.

'Cada vez que llega una patera o una lancha rápida', explica un guardia civil de Tarifa, 'intentamos encontrar al que la pilotaba, pero casi nunca la conseguimos. Aunque los pasajeros hayan sido estafados por él, nunca se atreven a denunciarlo por temor a represalias brutales cuando sean repatriados a Marruecos. Sólo los detenemos cuando han cobrado el viaje en el último momento y aún llevan el dinero encima. Te dan ganas de, de... ¿cómo se puede abusar así de esa pobre gente?'.

Tanto las investigaciones de la Guardia Civil como de la policía -su director, Juan Cotino, aseguró recientemente que es prioridad de su departamento luchar contra las mafias- arrojan un dato muy preocupante: cada vez son más los españoles que buscan un sobresueldo aprovechándose de los inmigrantes.

'En el engranaje de este tipo de inmigración', según la Guardia Civil, 'coexisten figuras que si bien no están integradas en organización alguna cooperan para llevar a buen término la actividad. Y un ejemplo son los transportistas: taxistas, camioneros... Actúan individualmente, trasladan a los inmigrantes que ya han desembarcado. Suelen ser el último eslabón de la red marroquí en España. Prestan sus servicios a bajo precio y transportan a los inmigrantes a las zonas carentes de mano de obra. El intermediario paga al camionero, a veces español pero también de otros países de Europa. En muchas ocasiones se prestan al trabajo ilegal sin el conocimiento de su empresa'.