El precio de la vivienda nueva reduce su ritmo de crecimiento al 3,2%

Los aspirantes a tener un piso en propiedad no pueden tomarse un respiro porque los precios siguen subiendo. Les queda el consuelo, al menos, de que suben menos que el año pasado. A finales de junio, el precio de una vivienda nueva de tipo medio (100 metros cuadrados) en una capital de provincia se situó en 22,9 millones de pesetas (229.300 pesetas por metro cuadrado), un 3,2% más que a comienzos de año.

Pese a que el aumento es superior al del IPC (1,7% hasta mayo), el dato confirma la desaceleración de los precios y la consolidación de un cambio de tendencia a la baja en el ciclo inmobiliario tras el boom inmobiliario vivido en los tres últimos que alcanzó su momento álgido en 2000. De hecho, el pasado año los precios se incrementaron a un ritmo muy superior (6,5% en el primer semestre y 5,2% en el segundo).

Ese cambio de ciclo se verá reforzardo aún más en lo que queda de año y a lo largo de 2002, como prueban otros datos como la disminución del número de viviendas libres construidas, que cayó un 7,2% en el primer trimestre, la subida de los tipos hipotecarios y, sobre todo, el aumento de oferta efectiva de viviendas que se hará más patente en el último trimestre de este año y a lo largo de todo 2002, cuando comiencen a entregarse los 595.000 pisos que se iniciaron en 2000.

Barcelona, la más cara La evolución de los precios en el primer semestre varía notablemente según las capitales y comunidades autónomas. Respecto a estas últimas, los precios crecieron más en el País Vasco (6%), Canarias (5,7%), Andalucía (4,9%) y Cantabria (4,8%). Por contra, Extremadura (3,9%), Murcia (3,8%), La Rioja (3,7%), Asturias (3,5%), Castilla y León (3,4%) y Baleares (1,7%) fueron las comunidades con menores subidas. Por capitales, Granada encabezó la lista de las mayores subidas, con un aumento del 8%, seguida de Vitoria (7,1%), Santa Cruz de Tenerife (7%) y A Coruña (6,8%).

Los incrementos han sido especialmente espectaculares en las ciudades costeras y en las islas como, por ejemplo, en Ciudadela (Menorca), donde los precios han subido un 18,3%, o en Blanes (Girona), donde han crecido un 12,4%.

En cifras absolutas, las viviendas más caras están en Barcelona, donde el metro cuadrado construido se paga ya a 357.600 pesetas, seguida de San Sebastián (355.000 pesetas), Vitoria (330.900 pesetas) y Madrid (325.500 pesetas). Por el contrario, las capitales de provincia con viviendas más asequibles son Badajoz (107.300 pesetas por metro cuadrado), Cáceres (122.700 pesetas), Huesca (124.000) y Teruel (124.500 pesetas).