El etarra Benjamín Ramos sale de Quatre Camins por motivos de salud

La Audiencia Nacional acordó ayer poner en libertad por razones humanitarias a Benjamín Ramos Vega, quien era el único interno de una cárcel catalana que cumplía condena por colaborar con ETA. Ramos abandonó la prisión de Quatre Camins a primera hora de la noche de ayer. En enero de 1995 fue detenido en Berlín acusado de ser el responsable de los pisos francos que albergaban al comando Barcelona, desarticulado parcialmente unos meses antes. En esa operación fue detenido el jefe del comando, Felipe San Epifanio, Pipe.

En 1997, la Sección Tercera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional condenó a Ramos a 11 años por colaboración con banda armada y ahora el mismo tribunal ha atendido la petición de su abogado de suspender la ejecución de la pena porque Ramos se encuentra en fase terminal. Anteriormente, la Generalitat le había concedido el régimen abierto, pero el juez admitió el recurso del fiscal y no llegó a disfrutar de esta situación.

Desde el día de su detención, Ramos argumentó que era portador del virus del sida, y su extradición a España estuvo a punto de causar un conflicto diplomático, pues la Audiencia de Berlín dudó en repatriarlo porque opinaba que en España no se respetarían sus derechos como preso.