La crítica crece en Fogueres

Aunque aún de forma tibia, los monumentos artísticos de les Fogueres de Sant Joan van recuperando el espíritu de reprochar o satirizar aquellos acontecimientos de la vida nacional, autonómica y local que, para bien o para mal, causan sorpresa al personal.

Los constructores se han servido de los temas de más rabiosa actualidad para llenar de contenido sus motivos artísticos, que serán pasto de llamas en apenas tres días. Así, se han valido de historias como la el ex reo español Joaquín José Martínez, que mantuvo en vilo a la sociedad española. El hombre más poderoso del mundo, George Bush, aparece junto al criminal de guerra más feroz que ha dado la historia, Adolf Hitler, y una guillotina, bajo un escenario inundado de sangre.

Los malos tratos, que se han revelado como una de las plagas sociales más dramática de estos tiempos, centran la crítica de la foguera El Fin Mágico, monumento de los hermanos Gómez Fonseca. El jurado otorgó ayer el primer premio en categoría especial a esta obra, del distrito Santa Isabel, que está presupuestada en más de 17 millones de pesetas.

La acusación de plagio a diversos escritores y profesionales televisivos durante este año ha sido también fuente de inspiración para los artistas fogueriles. La caja tonta tampoco ha salido indemne de la crítica artística. Un nuevo año, los constructores lanzan un duro mensaje contra las cadenas televisivas, por los niveles de chabacanería que llegan a alcanzar determinados programas.

Otro argumento que ha inspirado la sátira es el parque temático de Benidorm Terra Mítica, cuyas ayudas públicas investiga la Unión Europea.

Personajes locales de primera línea como el alcalde de la ciudad, el popular Luis Díaz Alperi, y el secretario local del PSPV, Ángel Franco, son parodiados en la foguera Diputación-Renfe, del artista Vicente Almela. Tampoco se libra el presidente de la Generalitat, Eduardo Zaplana, personaje ya fijo en les Fogueres. En este monumento se aborda además la controvertida malla publicitaria que cubre desde hace meses uno de los más emblemáticos edificios de la ciudad de Alicante, la Casa Carbonell, en la Explana de España. Tampoco escapa de la crítica el deterioro de la popular fuente de Los Luceros, reproducido en Metamorfosis, título de la foguera especial diseñada por Paco Juan para el distrito de Carolinas Altas.

La presente edición de Fogueres certifica la evolución experimentada por los monumentos en los últimos años, señala el presidente de la Comisión Gestora, José Manuel Lledó.

La primera jornada de la ofrenda floral a la patrona de Alicante, Nuestra Señora Virgen del Remedio, partió ayer de la Plaza de Luceros para desembocar en la Plaza del Ayuntamiento, lugar donde se erige el mural de flores, que permanecerá hasta la noche de Sant Joan. El mosaico de flores, que reproduce un mar surcado por cuatro veleros, está integrado por más de 4.000 ramos de flores de colores, preferentemente el azul.

Claveles y margaritas procedentes de Almería y Chipiona se han tintado de azul para la ocasión. La bellea del Foc 2001, María Rueda, portará las únicas flores importadas directamente de Holanda: una cascada de calas y algunas rosas, en color amarillo. Tras el desfile, la foguera oficial exhibió el espectáculo Con Luz Propia.

Antes de todo esto, La Plaza de Los Luceros volvió a vibrar con la tercera sesión del XIV concurso de mascletades, cuyo disparo arrancó un enfervorizado aplauso de los asistentes.

La única mujer que dispara en la Comunidad Valenciana, Reyes Martí, con 120 kilos de pólvora, supo acompasar el estruendo de la pólvora con un apoteósico final, en el que la luz rojiza de los cohetes puso el broche final.

Y por la noche, millares de alicantinos y turistas tomaron las calles y las barracas para disfrutar de la primera verbena de Fogueres