_
_
_
_
_

Una galería donostiarra muestra obra gráfica de Chillida, Tàpies y Valdés

También exhibe esculturas de Jáuregui

La Galería Ekain Arte-Lanak de San Sebastián (Aldamar, 1) propone hasta el próximo 15 de septiembre una aproximación a la obra de Eduardo Chillida, Antoni Tàpies, Manolo Valdés y Koldobika Jáuregui, autores que han dejado una huella indiscutible en la historia del arte contemporáneo español. Pero no se trata de un acercamiento a sus facetas más conocidas. La galería muestra la obra gráfica de los tres primeros y exhibe pequeñas piezas escultóricas de Jáuregui.

La exposición busca popularizar el arte, democratizarlo, exhibir obras a precios más asequibles para el bolsillo. 'Hay que quitarle a la gente de la cabeza que la galería es para ricos', dice el responsable de la galería, Juan Cruz Unzurrunzaga. A sus espaldas se exhiben 13 grabados de Chillida, creaciones que resumen la trayectoria gráfica del artista y hablan de su historia pasada: el más antiguo data de los años 70 y representa una mano con un balón de la época que remite a su paso como portero de la Real Sociedad. El más reciente está fechado hace apenas un mes, señala Unzurrunzaga.

Junto a Chillida figuran cinco obras de Tàpies, un artista que comenzó a pintar de forma autodidacta tras una enfermedad pulmonar y que ha tocado todos los palos; desde el realismo, al expresionismo y el surrealismo. En su obra gráfica también aparecen reiteradamente las cruces que distinguen su pintura.

La exposición permite así conocer en un mismo espacio una variedad de estilos de artistas además de renombre: 'He conseguido juntar aquí a mostruos del arte', explica Unzurrunzaga. De Valdés destaca su 'carrera meteórica' que la ha llevado a tener obra 'en los mejores museos del mundo'. El valenciano, residente en Nueva York, muestra en Ekain Arte-lanak, uno de sus referentes icónicos básicos en forma de grabados, Las Meninas. Pintor, escultor y grabador, Manolo Valdés tiene una obra marcada por sus referencias a otros grandes creadores. 'Me gusta decir que soy un artista de repertorio, como esos cantantes de ópera que les gusta hacer unas determinadas óperas porque las cantan mejor, el repertorio de mis imágenes, las imágenes a las que vuelvo (...) que nunca se cierran', dijo en una ocasión. 'Vuelvo a Velázquez porque me complace buscar nuevas variantes, repetir variantes, siempre más difíciles de encontrar, de introducir nuevas ideas y de confrontarlas entre ellas'.

Contrastes

La muestra de la galería es una exposición de contraste. En medio de la obra gráfica de estos tres artistas, figuran piezas del escultor vasco Koldobika Jáuregui. Presenta desde cerámicas a alumnios, bronces o hierros, que lo mismo adoptan la forma abstracta de un hombre con un pájaro sobre los hombros, de un bodegón, de una cabeza de elefante o de una ciudad subterránea. Son pequeñas esculturas de diferentes etapas que manifestan la evolución del artista. Entre ellas, tres pertenecientes a una serie, en la que Jáuregui dejaba patente su paso de lo figurativo hacia lo abstracto. Llevan su firma las dos únicas esculturas de gran formato que se exhiben en la sala. Dos piezas de madera en las que representa a un hombre y una mujer.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete
Koldobika Jáuregui ante dos de las esculturas en madera que expone en la galería.
Koldobika Jáuregui ante dos de las esculturas en madera que expone en la galería.JAVIER HERNÁNDEZ

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_