_
_
_
_

'No hay que mezclar inseguridad con inmigración'

Blanca Cia

Pregunta. Ha sido un año de muchos acuerdos firmados: el AVE, el aeropuerto, la línea 9 del metro... ¿Y ahora?

Respuesta. Éste ha sido un año de negociación. Creo que en los principales temas nos hemos puesto de acuerdo, y nos queda pendiente el tema de la Carta Municipal. Pero ha habido acuerdo en el AVE, el Plan Director de Infraestructuras, que aporta medio billón de pesetas para el transporte, la integración tarifaria, la ampliación del aeropuerto y del puerto, el plan de traslado de prisiones, en materia de guarderías y también sobre las residencias de ancianos. Y en el Fòrum 2004. Ha sido un año lleno de acuerdos para impulsar la nueva fase de expansión de Barcelona de los próximos años.

Que las instituciones públicas no tengan bien claro el sistema de seguridad provoca riesgo de generar o alimentar sentimientos xenófobos. Hay que llegar a un acuerdo sobre la cuestión
Más información
Jordi Portabella
Santiago Fisas
Joan Puigdollers
Imma Mayol

P. Sí, pero también con renuncias en aras del consenso.

R. En una negociación nunca se gana 10 a 0, ¿no?

P. Hace un año sólo se conocía el proyecto de rascacielos de la nueva sede de Gas Natural. Ahora ya hay diseñados unos cuantos. ¿Es la nueva Barcelona?

R. Sí, tambien ha sido el año en que se ha iniciado el debate de los rascacielos. Al de Enric Miralles, de Gas Natural, le seguirá el de Aguas de Barcelona, y después el de Glòries, entre otros. El concepto que queremos defender es que los edificios altos deben estar concentrados en un lugar y han de tener la medida adecuada. Se ubicarán principalmente en la zona de Diagonal-Glòries y las alturas serán de 140, 100 y 80 metros.

P. ¿Acaso porque no deben superarse los 175 metros de la Sagrada Familia?

R. (Risas). Que no se deban superar... eso es algo que nunca puede decirse. Las generaciones futuras deben poder decidir. Ahora defendemos una política en favor de una cierta densificación de la ciudad, en favor de la mezcla de usos, como ejes de la definición conceptual del modelo de Barcelona. Ese modelo supone que los barrios no se especializan por funciones, sino que todos ellos tienen mezcla de actividades. El 22@ es un concepto innovador porque busca expresamente la mezcla de actividad económica de nueva tecnología con los equipamientos y el uso residencial. Y todo ello, teniendo en cuenta que hay que impulsar la rehabilitación.

P. ¿ Y por qué el Ayuntamiento no hace más hincapié en ese ámbito?

R. Forma parte de nuestra política más activa. En Ciutat Vella hemos apostado clarísimamente por la rehabilitación. Reclamamos insistentemente que el Plan de Vivienda del Estado cambie de orientación y pase de privilegiar la construcción de edificios nuevos a dar prioridad a la rehabilitación. El Estado recupera las subvenciones a la rehabilitación de pisos antiguos, que pueden llegar hasta el 30% del coste en las zonas de protección especial, en apenas un año y medio a través de los impuestos que genera esa actividad.

P. Dejemos las piedras. Barcelona tiene un proyecto, el Fòrum 2004, que parece el secreto de la corona. ¿Por qué?

R. Las decisiones políticas más importantes ya están tomadas. Se ha constituido el consorcio, se ha acordado la financiación y las obras están en marcha. Pero lo más importante del Fòrum es el contenido, una propuesta de reflexión sobre las nuevas convivencias del siglo XXI. Puede parecer todavía un poco etéreo, pero es uno de los retos más ambiciosos.

P. Muchos creen que el Fòrum será una sucesión de espectáculos y una reforma urbanística.

R. No. Es un proyecto de diálogo cultural totalmente oportuno en el momento en que tenemos la inmigración y muchos paradigmas.

P. ¿Y qué hará para que los ciudadanos se animen?

R. Probablemente debemos dedicar más tiempo y más energías a explicar el proyecto.

P. Ha sido el año de los acuerdos, pero la ciudad tiene problemas. Y no pocos. En seguridad, ¿se ha encendido la luz roja?

R. Bueno, creo que la luz es todavía ámbar. Pero hay que actuar y prevenir. El problema no es principalmente de fuerzas de seguridad, de policías, ni de número de policías, sino de modelo de seguridad. Y esto significa justicia, código penal, sistemas alternativos a la cárcel, de rehabilitación y de prevención. Es un tema delicado, porque ante una ola de inmigración fácilmente se puede llegar a la conclusión siguiente: falla la seguridad, luego es culpa de la inmigración.

P. Pues es una asociación que cada vez está en boca de más ciudadanos. ¿Cómo remediarlo?

R. Tenemos inmigración porque hay crecimiento económico y demanda de mano de obra. Cuando teníamos tasas de paro del 20% no teníamos ningún problema de inmigración. Y que las instituciones públicas no tengan claro el sistema de seguridad plantea un inmenso riesgo de generar o alimentar sentimientos xenófobos. Hemos de llegar a un acuerdo de seguridad.

P. ¿Cómo?

R. Por ejemplo aprobando la Carta Municipal de Barcelona y la justicia local. Es la propuesta que Barcelona lleva años poniendo sobre la mesa. Todos éstos son temas muy serios que exigen una responsabilidad política de primer nivel, porque es muy fácil hacer demagogia con ellos. Y aquí no puede haber piques entre administraciones. Insisto en que hay que llegar a un acuerdo en seguridad para no mezclar las cosas.

P. Pero también faltan policías o guardias urbanos.

R. Esto es una cortina de humo. Ése no es el problema principal. En el primer trimestre de este año, la policía y la Guardia Urbana han detenido al doble de personas que el año pasado. Por tanto, ¿verdad que el problema no es de policías? Si detienen al doble de personas, pero luego tienen que soltarlas inmediatamente porque no existen servicios paralelos que inicien un proceso de rehabilitación o de castigo....

P. ¿Qué le parece que los inmigrantes tengan que encerrarse en una iglesia para tener papeles?

R. En lo referente a la inmigración todavía estamos aprendiendo. Hablo en términos generales y sin ánimo de entrar en polémicas. Estamos empezando. Piense que España tiene un 3% de población extranjera, cuando el promedio de la UE es un 10%. Por tanto, hay aún desajustes, inconsistencias y malas prácticas porque el aparato del Estado todavía no está preparado para afrontar esa cuestión. Estamos creciendo económicamente a un ritmo del 4% anual desde hace cuatro años. Hay un efecto llamada que proviene del propio crecimiento económico.

P. Y el Ayuntamiento, ¿qué debe mejorar?

R. Todo lo que nos corresponde como administración, que son los servicios sociales de asistencia primaria. Pero la Generalitat debe asumir la tutela de los menores, es decir, la patria potestad de los niños abandonados en la calle. Eso es algo que establece la ley, no me lo estoy inventando yo.

P. ¿Cree que esa tutela no se está ejerciendo debidamente?

R. Todos estamos empezando y encontramos ciertas dificultades, tanto el Gobierno de Madrid como el de la Generalitat, y también los gobiernos municipales.

P. Sí, pero mientras lo que se ve en la calle, en la plaza de Catalunya, son inmigrantes que viven al raso. ¿No van a hacer nada?

R. Bueno, es que nos vienen de todas partes. Dicen que hay funcionarios en Canarias que les dicen que vayan a Barcelona... También nos entran por la frontera europea. Parece que hay un corredor desde la Europa del Este que llega a España a través de Italia.

P. La oposición critica que el Ayuntamiento se mueve por inercia.

R. Creo que tenemos un proyecto de ciudad muy definido, un proyecto fuerte, en el que prevalecen la calidad de vida y la convivencia.

P. Si para el presidente del Gobierno, José María Aznar, España va bien, para Joan Clos, Barcelona va...

R. Barcelona va adelante, tiene un proyecto y también tiene los problemas derivados de este proyecto. Nada es gratis. Si estuviéramos parados todo esto no existiría.

El alcalde Joan Clos en la azotea del Ayuntamiento de Barcelona.
El alcalde Joan Clos en la azotea del Ayuntamiento de Barcelona.MARCEL.LÍ SÀENZ

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Blanca Cia
Redactora de la edición de EL PAÍS de Cataluña, en la que ha desarrollado la mayor parte de su carrera profesional en diferentes secciones, entre ellas información judicial, local, cultural y política. Licenciada en Periodismo por la Universidad Autónoma de Barcelona.
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_