Desfile
Ya me preparo para vestir de drag queen militar, para desfilar con todo el orgullo que brinda disparar flores, en homenaje a los millones de víctimas que han dejado estos 2.000 años de guerra entre hermanos. El diseño de mi atuendo será de un afamado diseñador español, quien deberá dejarlo bien manchado de sangre; traje de militar sin sangre, no es militar. Supongo que los Reyes, Trillo y Aznar aplaudirán cuando comience a sonar la Boommbaa, y yo cual malabarista intentando no caer de las plataformas. El casco será una pamela con atuendos sofisticados, como granadas, bombas y algunos trozos de miembros acribillados. Todo esto gracias a la motivación que supone ser la ciudad más importante en España este 2 de junio, con un monumento a un asesino verde.
