_
_
_
_

Defensores privados

Los abonos son el pan de los ciclos privados. 'No están en crisis', declara Antonio Moral, organizador de ciclos como Grandes intérpretes, de piano, Liceo de cámara o el Festival Mozart de A Coruña. Para Moral, esta modalidad no disuade al público poco habitual de las salas de conciertos.

'También cumplen una función pedagógica', señala. Y lo explica: 'Hace tres años nadie conocía al pianista ruso Sokolov en Madrid. Ahora hay tortas para verle. Si no hiciéramos abonos de ocho conciertos, la gente sólo iría a ver a Zimerman, a Brendel y a Pollini. Sin embargo, si tienen que ir a todos empiezan a conocer a los demás y luego descubren la valía de gente como Sokolov'. Así que, dice, 'el abono permite presentar a los desconocidos ante el público y crean una masa sólida de aficionados muy entendidos'.

Más información
Renovar el abono o morir

Moral cree que el envite de la venta libre lo deben aceptar los teatros y los ciclos públicos. 'Como los operísticos, que al ser los que tienen más demanda podrían permitirse el lujo de sacar más entradas a la venta'. Eso es algo que parece que hará la temporada que viene el Real, pero sólo con títulos muy conocidos, para los que hará sesiones exclusivamente destinadas a llenarse con entradas sueltas adquiridas en taquilla, según adelanta Juan Cambreleng, el director gerente.

Otro defensor del abono sin variaciones es Alfonso Aijón, responsable de Ibermúsica y programador desde hace 31 años. De éste vive, aunque sabe que también por culpa del mismo le es imposible renovar su propio público. 'No puedo porque nadie lo abandona', cuenta. 'Por eso, gracias a esa fidelidad, nuestro ciclo sinfónico sobrevive'. 'Tenemos 2.200 abonados y una lista de espera de 4.400', asegura. Una manera de vivir y de sinvivir, también. Pero Aijón no quiere cambios en su forma de conseguir adeptos: 'No puedo desperdiciar ese valor fijo, sería traicionar a gente que ama la música'.

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_