Leonardo Hernández: 'Estoy orgulloso por sustituir a Hermoso'

Leonardo Hernández terminó la temporada pasada en el tercer lugar del escalafón de rejoneadores por el número de festejos toreados. Fueron 66 las actuaciones, con un total de 59 orejas y cuatro rabos cortados en actuaciones individuales, y 20 orejas y 2 rabos en actuaciones por colleras. Se situó en este lugar por encima de figuras del rejoneo como João Moura y Pablo Hermoso de Mendoza, que sumaron menos actuaciones.

Con este privilegio no se conforma Hernández y dice que sus aspiraciones son mayores. 'Todos los toreros de a pie aspiran a ser el número uno', dice, 'y, del mismo modo, yo me propongo ser el primero de los rejoneadores. Estoy trabajando para ello y cada día intento perfeccionarme'.

Leonardo Hernández está metido en la tarea de renovar su cuadra de caballos. Hito importante de esa renovación es el cambio de su caballo Duque, uno de los mejores equinos de su cuadra, por Mambo. 'De entre los caballos que poseo, procuro seleccionar los mejores', afirma el jinete. 'En esa línea está el cambio de Duque por Mambo. Los dos son muy buenos caballos, aunque entre ellos hay diferencias. Los dos pisan terrenos muy comprometidos y los dos arriesgan bastante', manifiesta. 'Pero Mambo es más joven y tiene más porvenir'.

Hernández se siente a gusto hablando de sus caballos y se anima al referirse a las novedades de su cuadra: 'Tengo dos caballos nuevos, pero el que más futuro tiene es Lagos, un caballo árabe que vengo utilizando de salida y al que pretendo sacar también en banderillas'. Y se entristece al recordar a Balancín, un caballo que murió el pasado año a consecuencia de una cornada sufrida en la plaza de Zaragoza.

Entiende el caballista que así como entre los matadores existen algunos que son considerados maestros por sus compañeros, también en el rejoneo puede hablarse de magisterio. 'Entre los que pueden ser tenidos como maestros del rejoneo, no podemos olvidar a Manuel Vidrié, Ángel Peralta y Álvaro Domecq'.