El municipio inicia el trámite para vender el mercado de Torrijos

El mercado de Torrijos, de dos plantas, no es un mercado normal. Es el único de la cincuentena de mercados municipales que cuenta con una calificación especial en el Plan General que le permite construir pisos encima. 'Esto le convierte en un regalo', advierte el concejal socialista Joaquín García Pontes, que añade: 'Está claro que el municipio tiene pensado venderlo, pero no se sabe todavía si a los comerciantes o a quién. Eso se lo preguntaremos al concejal de Hacienda [Pedro Bujidos] mañana [por hoy] en la comisión'.

El Ayuntamiento de Madrid lleva años impulsando la venta de mercados municipales a los tenderos que ocupan los puestos en régimen de concesión. La razón es estimular unos puestos de venta que desde hace décadas vienen quedándose vacíos, sin mucha demanda por los clientes. Hasta ahora, se han vendido dos de estos mercados municipales, ambos comprados por los mismos tenderos.

Un proyecto de 1999

El pleno municipal de diciembre de 1999 incluía el punto por el que se permitía que el mercado de Torrijos fuera demolido y en su lugar se construyera un edificio de siete plantas. Entonces, de 173 puestos con que contaba el centro, sólo 29 se encontraban ocupados. El resto habían sido abandonados por sus antiguos adjudicatarios debido a que no les resultaba rentable. Según los planes de Urbanismo en diciembre de 1999, las dos primeras plantas se iban a dedicar a proveer a los tenderos de puestos; las otras cinco iban a llenarse de casas: se tenía pevisto construir 163 pisos, con lo que se sufragaría la operación.

Pero los concejales socialistas Matilde Fernández y García Pontes presentaron en la sesión plenaria un documento: los tenderos del mercado de Torrijos se comprometían a comprar el mercado por 577 millones de pesetas (precio tasado por el municipio hacía años), pero a la vez ya habían cerrado la reventa a una constructora por 2.800 millones de pesetas. El PSOE e IU, representados por el concejal Gerardo del Val, criticaron este hecho. El alcalde, José María Álvarez del Manzano, aseguró entonces: 'Hasta que no haya unanimidad no se venderá'. Así, tanto la venta como la operación urbanística para construir las casas quedaron aplazadas. Hasta ahora, según el PSOE: 'Por lo visto, ya lo van a vender', dijo ayer García Pontes.