'El equipo más pequeño ha hecho una final grande'
Mané asegura que el Alavés "seguirá dando que hablar en Europa"
John Toshack, entrenador de la Real Sociedad, apostó antes de la final de Dortmund a que el Alavés ganaría la UEFA. No es que tenga una afinidad en particular con sus vecinos vascos. Más la tiene con el Liverpool, equipo al que perteneció en los años setenta. El galés sostiene una teoría para el Euroalavés: "Les pueden marcar todos los goles que sean, que ellos siempre tienen otro en la recámara". Falló en el pronóstico, pero sus tesis, sin embargo, se siguen teniendo en pie. El Alavés también marcó el último tanto en esta ocasión, aunque en propia puerta.
Esa ambición goleadora ha definido al equipo de Mané en su primera experiencia y, aunque el partido no terminó con un resultado favorable para el grupo vitoriano, el partido tuvo el inconfundible sello alavesista. El equipo antes conocido como Pink Team, es el equipo que más goles ha marcado en esta edición de la UEFA.
Mané y sus jugadores no tienen dudas de que la final acabó con nueve goles, con un espectáculo fuera de lo habitual en un choque de estas características, gracias a ellos mismos. "Estoy feliz porque se ha demostrado que el fútbol lo hacen grande los hombres que lo juegan y las aficiones, que han estado modélicas. Dortmund ha visto una final grande porque el club más pequeño ha posibilitado una final grande". Queda claro cuál es la palabra de moda ahora en el alavesismo.
Por si quedara alguna duda, Mané ahondó en la cuestión. "Somos los mismos que hace dos horas", explicó a la prensa al terminar el partido. "Somos hombres hechos y derechos, que hemos llegado hasta aquí haciendo disfrutar a la gente. Mis jugadores son hombres grandes, capaces de intentar cosas grandes".
Al Alavés le dolió la derrota, evidentemente, y le dolió mucho. Pero lo peor fue la forma. "Ha sido lo más ácido. En un gol de oro, la primera vez que ocurre en una final entre clubes", puntualizó el entrenador, que acudió a la rueda de prensa acompañado por primera vez por su ayudante, Ángel Garitano, Ondarru.
Mané salió del Westfalenstadion consciente de lo ocurrido, orgulloso, sin el rostro crispado ni cualquier signo que denotara un atisbo de disgusto. Y siempre habló de los futbolistas maravillado. "Tienen un gran carácter, son muy competitivos. Tienen orgullo, buen hacer y casta. Hoy están muy dolidos, pero mañana lo estarán menos. Mañana serán más grandes".
Mané, un tipo realista, sensato y moderado, hizo un guiño al futuro. Aunque pueda parecer irrepetible el comportamiento del Alavés en la UEFA, el técnico vizcaíno anticipa próximos años en una línea similar. "Estoy convencido de que este equipo seguirá dando que hablar en Europa y espero que otra vez podamos vernos en una cita importante".
El partido gustó a cualquiera que lo presenciara. "A nosotros, un poco menos", matizó Mané, pero admitió que sus jugadores llegaron exhaustos al tramo final. "Tuvimos el premio del 4-4, pero en la prórroga estaban medio muertos".
Houllier, de acuerdoMientras Mané hablaba, Gèrard Houllier, el entrenador del Liverpool, aún agarraba la Copa con sus jugadores sobre el césped. No escuchó a su colega, pero le quedó también impregnada la misma palabra: "El Alavés ha sido grande. Ha jugado de una manera espectacular. Por eso nos alegra más esta victoria. Nosotros apreciamos más lo difícil".El técnico francés continuo su explicación afirmando que "una final se juega para la inmortalidad y los jugadores de ambos equipos recordarán siempre esta noche. Eso vale también para el alavés, porque un gran partido como el de hoy no se hace con un sólo equipo", reconociendo así el valor de su adversario en la noche de ayer.
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