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Felip Puig suspende una reunión en Tortosa ante la protesta por el apoyo de CiU al trasvase

Puig debía reunirse ayer por la tarde en Tortosa, en la sede de la Delegación de la Generalitat, con una decena de representantes sindicales, miembros de cooperativas y universidades, para explicarles el voto de Convergència i Unió a favor del PHN emitido la pasada semana en el Congreso. Pero unos 300 manifestantes se habían congregado frente a la sede, situada en una estrecha calle del casco antiguo de la ciudad. Ante esta situación, el delegado del Gobierno en las comarcas del Ebro, el convergente Francesc Sancho, optó por suspender la entrevista y la convocó de manera inesperada en la localidad de la que es alcalde, L'Ampolla.

Así, el consejero se reunió finalmente, en el Club Náutico, únicamente con los representantes de Unió de Pagesos y de Comisiones Obreras. Tanto Puig como Sancho, que fueron aplaudidos a su llegada al club por medio centenar de personas, hicieron especial hincapié en la necesidad de evitar una fractura social, por lo que hicieron un llamamiento a la responsabilidad a los líderes políticos. La suspensión del acto se produjo el mismo día en el que aparecieron pintadas amenazadoras en el domicilio de Sancho.

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El ambiente en las tierras del Ebro se ha enrarecido a pasos agigantados en la última semana. El de CiU al PHN, la aparición de panfletos anónimos favorables al trasvase pocos días antes de la manifestación que reunió a 20.000 personas el pasado domingo en Tortosa, las declaraciones de Artur Mas el mismo día sobre el 'griterío de unos cuantos' y la acusación de Felip Puig de politización por parte del PSC de las plataformas creadas en las comarcas del Ebro han encrespado más los ánimos, ya de por sí tensos en la zona.

Ayer el ambiente no podía estar más caldeado. Unos 300 manifestantes se concentraron frente a la Delegación de Gobierno en Tortosa, cifra bastante superior a la acostumbrada en las visitas de los consejeros. El propio delegado, Francesc Sancho, fue objeto de los insultos de 'traidor' y las peticiones de dimisión efectuadas por los manifestantes a primera hora de la tarde. Por la mañana, la delegación había emitido un comunicado de condena de las pintadas aparecidas. En una de ellas podía leerse: 'ETA, mata a Sancho'. El delegado declaró que no presentará denuncia.

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