Llach y Prada presentan nuevos discos, y EL PAÍS celebra sus 25 años

- La España ecléctica. El primer ejemplar del diario EL PAÍS salió a la calle el viernes 4 de mayo de 1976, la antesala de un fin de semana en el que se celebró con alegría el Festival de los Pueblos Ibéricos en la Universidad Autónoma de Madrid, pero con tristeza un sangriento Montejurra. Los conciertos que celebran los 25 años de EL PAÍS entierran lo trágico de entonces y recogen de manera simbólica lo mejor de aquel histórico fin de semana. Como aquel festival, los tres conciertos muestran algo de la variedad de la música que hoy se hace en España, reflejo de una sociedad plural que se ha consolidado en la democracia en los mismos años de vida que el periódico.

Englobado cada uno de ellos en un concepto generalizador, la recaudación de cada día se destina a distintas causas humanitarias. Así, la del primero, Un país de raíces -con el trío madrileño Ketama y las aportaciones del cantaor José Mercé y el guitarrista Raimundo Amador-, irá para Save The Children, una ONG especializada en la infancia de todo el mundo. La del día 4, Un país de pop y rock -con Jarabe de Palo, La Oreja de Van Gogh y Danza Invisi-ble-, será para ACNUR, la organización de la ONU encargada de proteger a los refugiados; y la del último día, Un país de música -con Joaquín Sabina, Pedro Guerra y Víctor y Ana- está destinada a Amnistía Internacional (AI).

- De otros cantautores. Pero antes, Pedro Guerra habrá presentado en sociedad Contamíname, la fundación que ha creado con el nombre de una de sus canciones más famosas para buscar elementos de unión entre las personas y sus distintas culturas. Lo hace con un cartel de lujo: la mexicana Julieta Venegas y los brasileños Chico César y Lenine. Unos y otros compartirán escenario con la idea de mostrar el respeto a las diferencias enriquecedoras.

Madrid acoge además al ampurdanés Lluís Llach, que presenta su último disco, Temps de revoltes, y al leonés Amancio Prada, que hace lo propio con Escrito está, un disco exquisito en el que pone música a poemas de Federico García Lorca, Pereira, Rabindranath Tagore, Antonio Machado o Miguel Hernández, entre otros muchos. La Casa del Conde, La Verbena Clandestina -el nuevo proyecto de Luis Farnox, el Mecánico del Swing- y Maldeamores apuestan también por el cuidado de las letras.

- De otro pop y rock. Además de su participación en los fastos de este periódico, La Oreja de Van Gogh acude el domingo a las fiestas de Valdemoro, la cercana villa madrileña que también recibe a Revólver. Son dos conciertos de éxito asegurado que se completan con el de Isabel Pantoja, su primera actuación pública tras los achaques que obligaron a suspender la tanda de conciertos que hace un par de meses estaba ofreciendo en la capital. El carismático pero huidizo Antonio Vega canta en la plaza del Dos de Mayo las canciones de su reciente De un lugar perdido, dentro de la programación de las fiestas mayores de la Comunidad Autónoma de Madrid, actos que cuentan también con la rumba tecno del trío Camela.

Los Planetas vuelven a La Riviera con su reciente disco, Unidad de desplazamiento, y el elegante Paul Weller presenta Heliocentric, su último trabajo, en el que vuelve a hacer valer la enorme influencia que ha ejercido en los grupos del pop británico tras su proyectos en The Jam, The Style Council y su carrera en solitario. Las extrañas divagaciones de Steve Wynn y el enérgico power pop de los australianos Pyramidiacs contrastan con el recuerdo punki a los Ramones, ahora que acaba de fallecer su cantante, que ofrecerán DDT.

- Y de otras raíces. De Cuba, Caridad Hierrezuelo viene a revalidar su título de Gran Dama del Son, mientras que la madrileña Beatrice Binotti confirma su transformación brasileña cuando canta bossa nova. La guitarra de Jayme Marques también busca el eco carioca, mientras que Jerry González o Calle Caliente tiran del jazz hacia el Caribe latino. El sexagenario saxofonista Steve Marcus, que ha tocado para Frank Sinatra o Ella Fitzgerald, pasa la semana en el Café Central; el guitarrista tejano Bob Kirkpatrick inicia el festival de jazz de la Universidad Politécnica y el San Juan Evangelista celebra su 20º Festival de Jazz. Lo empieza el saxofonista Dave S. Ware, sigue con la guitarra de Santiago de la Muela y los legendarios The Heath Brothers, una familia entregada al jazz, y concluye con el quinteto del trompetista italiano Paolo Fresu.

La raíz flamenca sirve de excusa a la música de Ea!, así como al cante de Vicente Soto Sordera y al baile de Tres al Compás. Los senegaleses afincados en Madrid Djanbutu Thiossane hacen sonar los tambores y melodías de su país, mientras que Ataraxia enseña algo del folclor de Italia.

La coral Musicanz rinde homenaje en el municipio de Tres Cantos a las célebres composiciones de las películas de Walt Disney. Entre la música de vanguardia, las nuevas tendencias y las últimas técnicas pinchando discos se mueven las propuestas de Bent, El Chico Biónico y Le Hammond Infierno, los tres artistas inclasificables de esta ecléctica y variada semana musical.