Minardi, el equipo 'hispano'
La escudería italiana Minardi se salvó de la quiebra no sólo gracias al contrato que tenía con Alonso, sino porque el australiano Paul Stoddart, propietario de una compañía aérea, decidió comprarlo. Hasta la fecha, Stoddart ha dado muestras de una gran sabiduría. La primera, apostando por pilotos jóvenes, y la segunda, dejando al viejo patrón, Giancarlo Minardi, que siga dirigiendo técnicamente el equipo.
Una vez Retirado Ken Tyrrell, ya sólo queda este hombre, el último viejo zorro de los circuitos. La escudería italiana ha sido un gran vivero de pilotos, pero, además, la que ha acogido a la gran mayoría de españoles que han corrido en la Fórmula 1. Adrián Campos, Luis Pérez-Sala, Marc Gené, Fernando Alonso... 'y otro más en la Fórmula 2, Emilio de Villota...', añade con un mirada pícara.
Según Adrián Campos, a Minardi le ha costado tanto hacerse un hueco en la Fórmula 1 porque no era británico. 'Alguna cosa le hacía distinto a los demás equipos, de modo que no le han dejado funcionar', añade, y explica que el ambiente en el seno de la escudería italiana siempre ha sido distinto e incluso que se podía fumar fuera de los boxes.
Minardi quedó decepcionado por la salida de Telefónica como patrocinadora, aunque entiende perfectamente cuáles han sido las razones por las que la nueva dirección del gigante de las comunicaciones ha querido desmarcarse de la herencia que dejó el equipo de Villalonga. Lo que no entiende el italiano es como es posible que en estos momentos no haya ni un solo patrocinador español en la Fórmula 1, especialmente en el caso de una petrolera como Repsol, que, en su opinión, debería estar ahí.
¿Qué vale un equipo de Fórmula 1? Se dice que Briattore compró Benneton por 15 millones de dólares y lo ha vendido a Renault por 150 y que Ford pagó a Stewart una cantidad similar para convertirlo en Jaguar. ¿Y Minardi? No se sabe lo que vale un equipo de la Fórmula 1, piensa Minardi; 'es como el arte: vale lo que se quiera pagar por él'. El secreto ahora, añade, es el motor. '¿Quién puede permitirse desarrollar un motor de Fórmula 1? Sólo las grandes marcas constructoras. Pero lo que no se entiende es que cuando entra un nuevo proveedor de neumáticos, como ahora Michelin, se le exige que provea al menos a un 30% de los equipos, pero no es el caso del motor'.
Minardi considera que el futuro no está tan claro como lo ven otros y apunta a la entrada de Toyota: 'No hay mecánicos ni gente suficiente para un nuevo equipo en la Fórmula 1. Los de Toyota, por ejemplo, han venido a buscar gente mía. Se han llevado a unos pocos, la mayoría de segunda fila, pagándoles cantidades de dinero que nunca habrían podido cobrar'.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.