Un inmigrante para defender al pueblo

Cuentan sus amigos y colaboradores que Bernardo del Rosal tiene un perfil poco definido. De trato cordial y talante moderado, llegó a Alicante hace 10 años. Es, por tanto, un Síndic de Greugues cunero. 'Soy un inmigrante que defenderá a esta tierra como si fuera suya', comentó ayer Del Rosal, quien destaca de su vida dos acontecimientos importantes: la obtención de la cátedra de Derecho Penal y su designación, ayer, como Síndic de Greuges. 'Esto demuestra que la Comunidad Valenciana es una tierra de acogida', sentencia.

Aunque nació en Valladolid, se trasladó a la capital de España con sólo siete meses. Influenciado por su tío, Manuel Cobo del Rosal, uno de los penalistas de mayor prestigio en España, y por 'convicción', estudió Derecho en Madrid. Luego se forjó como profesor de Derecho Penal en prestigiosas universidades: las de Berkeley y Stanford (EE UU), Cambridge (Reino Unido) y Friburgo (Alemania).

De Berkeley, donde estuvo dos años como investigador especialista, llegó a Alicante para ganar la cátedra y trabajar como director del Instituto de Criminología, que en la actualidad dirige su esposa, María José Segura, profesora de Derecho Penal. Durante dos años fue decano de la Facultad de Derecho, cargo que abandonó en 1995 aduciendo problemas de salud. Su vida académica la ha compaginado siempre con otros cargos, como la magistratura suplente de las audiencias provinciales de Madrid y de Alicante, hasta que en 1994 fue nombrado Defensor del Cliente de las cajas de ahorro valencianas.

Bernardo del Rosal no tiene afiliación política alguna. Se considera 'un profesional liberal' ajeno a las disciplinas de los partidos e 'independiente en lo político'. Aunque en la Universidad de Alicante algunos de sus compañeros recuerdan que, al igual que el actual director general de Universidades, Salvador Forner, publicó en la prensa artículos contrarios al proyecto insignia del ex rector Andrés Pedreño, el Parque Científico (Medpark), y respaldó en público la actuación del presidente Eduardo Zaplana en este espinoso asunto.