Cultura reduce su aportación económica a la Organización de Estados Iberoamericanos

Representantes de los ministerios de Educación, Cooperación Internacional o Presupuestos de los 20 países miembros de la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI) se reunieron ayer en Valencia para preparar los trabajos de la cumbre de jefes de Estado que se celebrará en Perú el próximo noviembre. Los delegados del consejo directivo de la OEI aprobaron un presupuesto 'continuista' en su primera sesión de trabajo, pero algunos delegados expresaron la preocupación que genera el recorte de la aportación del Instituto de Cooperación Iberoamericana (ICI), que depende del Ministerio de Educación y Cultura, y que tendrá repercusión directa en las becas de intercambio.

El consejo directivo de la OEI, una institución volcada en asuntos relacionados con la Educación y la Cultura en los países unidos por la lengua y una tradición cultural común, se reunió en el Monasterio de Sant Miquel dels Reis, en Valencia. Representantes de Brasil acudieron como miembros de pleno derecho a los trabajos mientras que los delegados de Portugal todavía mantienen la condición de observadores en los trabajos de una institución surgida hace cincuenta años con la intención de fomentar el intercambio de experiencias educativas en el mundo iberoamericano. Un diplomático español sugirió que después de la entrada de Brasil es prácticamente seguro que Portugal se sumará en breve a la organización.

La primera reunión del comité directivo se centró en el informe de gestión de los trabajos desarrollados durante los dos últimos años y en el análisis de los presupuestos para el próximo bienio. Nadie se salió del guión, según algunos participantes, y el presupuesto de la organización se aprobó de acuerdo con una pauta continuista de los trabajos desarrollados hasta la fecha. La organización, después de todo, sólo persigue ofrecer soporte técnico a los programas educativos que desarrolla cada Estado de acuerdo con sus posibilidades.

Pero sí provocó cierto malestar entre algunos participantes la intención anunciada del ICI de reducir su aportación para fomentar becas de intercambio entre los países miembros de la OEI.

La cuantía del recorte no trascendió, pero se ajusta al discurso que ofreció a media tarde el presidente del Gobierno español, José María Aznar, quien puso en duda la necesidad de aportar ingentes recursos a la educación si no se respetan ciertos principios esenciales, entre los que destacó la necesidad de fomentar 'el esfuerzo personal' y 'la ambición de superación' entre el alumnado.José María Aznar recibió ayer en Valencia la medalla de oro de la institución de manos del argentino Francisco Piñón, secretario general de la OEI. Piñón destacó la vocación de ofrecer soluciones regionales a problemas locales en materia educativa y de compartir esfuerzos en la mejora de la formación de los estudiantes de toda Iberoamerica. 'La educación de calidad ocupa hoy un lugar entre los temas centrales de nuestras sociedades, ejerciendo un papel compensador de las desigualdades, así como instrumento de la ampliación del capital social', subrayó. Uno de los objetivos que se ha trazado la OEI en esta reunión es, precisamente, lograr el compromiso de los países socios de incorporar las nuevas tecnologías como materia de estudio obligado en las escuelas para formar jóvenes que puedan 'responder a los nuevos retos de la globalizacion'. Un concepto de innovación tecnológica que está indisolublemente ligado a la idea de implantar recursos que sean clave para 'el desarrollo de las zonas más rezagadas'.

Especial mención recibieron, tanto de parte de Piñón como de Aznar, los programas de alfabetización de adultos desarrollados en cuatro países centroamericanos: El Salvador, Honduras, Nicaragua y República Dominicana. También mencionó las reformas educativas acometidas en México, Argentina, Brasil, Chile y Perú, como marco desde el que justificó su anuncio de una profunda reforma del conjunto del sistema educativo español desde los niveles elementales hasta los universitarios.

Al margen de los presupuestos, los representantes de los ministerios de educación de los 20 países iberoamericanos acordaron una serie de medidas para regular actividades de las diversas universidades virtuales que operan en Iberoamerica a través de la red para validar sus diplomas en toda la región, a propuesta del ministro de Educación de Bolivia, Tito Hos de Vila Quiroga. La iniciativa fue inmediatamente secundada por los representantes de Brasil y España.

Pilar del Castillo, ministra española, solicitó a la OEI que instituya foros para debatir el impacto de los nuevos sistemas educativos virtuales en la comunidad iberoamericana. También se acordaron varios programas de cooperación bajo los lemas Educación en Valores; Desarrollo Escolar y Administración Educativa; Calidad y Equidad en la Educación; Educación y Trabajo; Educación Superior; Ciencia, Tecnología, Sociedad e Innovación; Iberoamérica: Unidad cultural en la Diversidad. Los ministros cerraron la primera sesión de trabajo con un acuerdo para impulsar el denominado Observatorio de Educación Iberoamericana, como espacio de reflexión e intercambio de experiencias, desde el que se nutrirá la futura programación educativa de los estados iberoamericanos.