El Ayuntamiento de Sevilla reconoce 'fallos en la ejecución de la obra' de Alemanes y cambiará las losas por adoquines

La delegación de Obras Públicas del Ayuntamiento de Sevilla, dirigida por Isabel Guerra Libreros, del PA, terminó en 2000 la reforma de la pavimentación del entorno de la catedral. El adoquín tradicional fue sustituido por losas de quarzita verdidorada en una obra que, en el tramo de la calle Alemanes, contó con un presupuesto de 140 millones de pesetas y fue concluida en marzo del pasado año.

Seis o siete meses después comenzaron a aparecer losas rotas en la pavimentación recién terminada, que provocaron grandes baches que todavía dificultan el tráfico por esa calle.

Tras las denuncias de la oposición, la delegación de Obras Públicas se comprometió a realizar una investigación sobre el proceso de ejecución de la obra. Guerra Libreros hizo ayer público ese trabajo, que achaca los desperfectos surgidos a 'una suma de circunstancias' de entre las que destacan 'los fallos en la ejecución de la obra'. La concejala citó además el exceso de tráfico que sufre la calle, las obras ejecutadas en edificios de la zona y la temporada de lluvias.

El proyecto que se ejecutó en la calle Alemanes era similar a la reforma que unos años antes se hizo de la cercana plaza de la Virgen de los Reyes. La obra se diferenció en el reforzamiento del pavimento, para que pudiera soportar el peso del tráfico rodado, que la plaza no tiene.

Para ello, se recomendó poner más cemento en el mortero que soporta la losa y unir unas a otras mediante juntas pegadas con látex. La investigación ha puesto al descubierto que, finalmente, ni se usó más cemento que en la ocasión anterior ni se puso látex para unir las losas.

Guerra Librero evitó hablar de mala fe de la empresa constructora y lo dejó todo en una 'descoordinación'. 'No es culpa de nadie. La obra está perfectamente ejecutada en un 90%. Sólo falló el pavimento', dijo.

Obras Públicas anunció ayer la decisión de volver a pavimentar la calle, entre julio y agosto, aunque esta vez se colocará el tradicional adoquín en lugar de la lujosa quarzita verdidorada. Guerra aclaró en que los arreglos no le costarán un duro al Ayuntamiento, ya que la obra estaba todavía en garantía y será la empresa constructora la que se haga cargo de los gastos.

La concejala aseguró que no considera un error haber usado losas de ese material, traído de Huelva y Galicia, pero que su delegación no lo volverá a usar. Así, dos años después, los adoquines volverán a cubrir la calzada de la calle Alemanes.