Investigación en El Ejido de un supuesto maltrato a deficientes

Cuatro empleados acusados de presuntos malos tratos a deficientes mentales en un centro de el Ejido (Almería) han sido apartados provisionalmente de su puesto de trabajo, a la espera de que se confirme la denuncia, según dijo ayer el consejero andaluz de Asuntos Sociales, Isaías Pérez Saldaña. La Delegación de esta Consejería en Almería ha trasladado a la Fiscalía la denuncia después de que, la semana pasada, cinco trabajadores acusaran a otros cuatro compañeros de maltratar a los internos.

El centro, una residencia para personas con discapacidades severas, se abrió en El Ejido el mes de mayo del pasado año y pertenece a Asprodalba, una asociación de familiares de personas discapacitadas que mantiene un concierto con la Junta.

La semana pasada una trabajadora de la residencia -que cuenta con 30 empleados para atender a los internos- insinuó la existencia de malos tratos en el centro a funcionarios de la Delegación de Asuntos Sociales.

'En cuanto tuve conocimiento de esas sospechas ordené que se realizara una investigación, aunque, además de las insinuaciones de malos tratos, se denunciaban también otras cuestiones de caracter laboral, lo que podía hacer pensar, en un principio, en un enfrentamiento entre trabajadores', explicó ayer Luis López.

Medio año sin denuncia

El viernes cinco trabajadores se entrevistaron con el responsable de Asuntos Sociales en Almería y aseguraron que, desde el mes de agosto del pasado año, los internos del centro han sido maltratados por otros cuatro empleados.

'Ante la denuncia de cinco personas trasladé el caso a la Fiscalía, a pesar de que aún tenemos que hablar con el resto de trabajadores y con todos los padres de los internos del centro', explicó López.

Serafín Molina Cara, presidente de Asprodesa desde hace 16 años, es el padre de uno de los internos afectados por los presuntos malos tratos. 'A los familiares, esto nos ha caído como una bomba. Lo primero que hemos hecho ha sido suspender cautelarmente de empleo a los cuatro trabajadores acusados por sus compañeros hasta que se sepa lo que ha pasado. Pero lo que no podemos explicarnos aún es cómo las personas que denuncian esos malos tratos han esperado más de seis meses para hablar. ¿Si estaban viendo que había malos tratos, cómo han podido dormir tranquilos durante seis meses ocultando esa situación'.

El presidente de Asprodesa insistió en que la asociación está dispuesta a investigar el caso 'hasta sus últimas consecuencias'. Sin embargo, se mostró también convencido de que, 'detrás de esto, se esconde alguna otra cosa que en estos momentos no conocemos'.

Aunque ni el presidente de Asprodesa ni el delegado de Asuntos Sociales quieron detallar en qué consistían los malos tratos denunciados por esos cinco trabajadores, sí aseguraron que 'se trata de hechos muy graves'.