La patronal francesa retira su boicoteo a la jubilación a los 60 años, pero insiste en la reforma de las pensiones

Los trabajadores franceses del sector privado seguirán jubilándose a los 60 años con el 100% de la pensión; al menos, hasta diciembre de 2002. El Medef, principal organización patronal de Francia, ha propuesto un pacto a los sindicatos para asegurar la financiación del sistema hasta esa fecha, retirando así el boicoteo anunciado a mediados de enero. Pero la patronal intenta también emplazar al Gobierno, conjuntamente con los sindicatos, para una reforma del sistema básico de pensiones que 'privilegie la duración de la cotización' a la hora de acceder a la pensión a tarifa completa, punto que suscita fuertes reservas de las centrales.

Era difícil que Medef pudiera hacer otra cosa que dar un paso atrás, vistas las manifestaciones de enero, que reunieron a más de 300.000 personas en su contra. A lo largo del fin de semana se produjeron negociaciones entre patronal y sindicatos para restablecer la gestión del sistema de pensiones complementarias -el que permite pagar las jubilaciones a los que se retiran entre los 60 y los 65 años-, que está gestionado paritariamente por patronal y centrales. Pero el texto propuesto en esa mesa implica también el compromiso de los sindicatos en la exigencia al Gobierno de que reforme el sistema básico de pensiones, que es de competencia estatal.

La mayoría de las centrales se han negado a firmar: la CGT, que es la más importante, no ve ningún sentido a suscribir un acuerdo con la organización patronal que implica interpelar al Gobierno.

Sin embargo, a falta de una relación de fuerzas favorables, Medef ha obrado para empezar a romper la unidad sindical. La central CFTC confirmó ayer su acuerdo con el texto propuesto por la patronal, que interpreta como 'el mantenimiento sin cambios del derecho a jubilarse a los 60 años' y el reconocimiento del valor del sistema de pensiones tal como está concebido en Francia. El sindicato de inspiración cristiana CFDT decidirá hoy su postura.

Force Ouvrière (FO) está de acuerdo en firmar 'una parte del proyecto de acuerdo', en concreto la prolongación del sistema de pensiones complementarias hasta 2002, pero no ha clarificado qué piensa hacer con las demás medidas de fondo.

A corto plazo, la renuncia de Medef a las consignas de suspensión de cotizaciones asegurará la financiación del sistema complementario de pensiones hasta diciembre de 2002. Falta volver a poner la maquinaria en marcha. Una parte de las empresas no había seguido la consigna de la patronal, lanzada a finales de enero, tanto por la dificultad técnica de rectificar las hojas de pago a los trabajadores, como para ahorrarse problemas con los sindicatos.

La dirección de Medef se felicita por haber apaciguado las tensiones. Habría preferido una reforma del sistema de pensiones complementarias que sirviera de modelo a la modificación de las pensiones básicas del Estado y no lo ha conseguido. El resultado de las negociaciones es una solución que implica renunciar a la presión sobre la reforma global de las pensiones durante los próximos meses, aplazando la cita hasta después de las elecciones legislativas de 2002.

Para el vicepresidente de Medef, Denis Kessler, la reforma general del sistema de pensiones 'no sólo es necesaria, sino también urgente' y debe girar en torno al 'alargamiento progresivo de la duración de la cotización para tener derecho al 100% de la pensión'.