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La Confederación garantiza un riego sin restricciones en el Guadalquivir

Alejandro Bolaños

Las abundantes precipitaciones registradas en la región en otoño e invierno permitirán a los regantes de la cuenca del Guadalquivir (la más extensa de la comunidad) iniciar la campaña agrícola 'con normalidad', según explicó Pedro Parias, secretario de la federación de comunidades de regantes de la cuenca. La comisión de desembalse de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir decidió ayer destinar 1.400 hectómetros cúbicos de agua para esta campaña, lo que los regantes consideran 'suficiente' para garantizar los cultivos de las 400.000 hectáreas de regadío de la cuenca.

Las reservas acumuladas por los pantantos del sistema de regulación general (que se dedica casi exclusivamente a suministrar agua a los regadíos) suponen ya el 58% de la capacidad total de estas presas, y está previsto que las escorrentías provocadas por las últimas lluvias aumenten el nivel hasta el 65%. Eso permitirá a estos embalses, que ahora almacenan 4.000 hectómetros cúbicos, mantener 1.600 hectómetros tras el final del verano y de la campaña agrícola. La dotación aprobada por la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir supone una asignación media de 5.500 metros cúbicos por hectárea de riego, según los cálculos de los regantes.

En la campaña pasada, tras dos años secos, la Confederación Hidrológica del Guadalquivir aprobó una dotación restrictiva, de 1.000 hectómetros cúbicos, que amplió a otros 200 tras las protestas de los regantes, que veían peligrar los cultivos más exigentes (arroz, algodón, maíz). La gestión hídrica de la Confederación en estos dos últimos años -que en 1999 aprobó el desembalse de 1.800 hectómetros cúbicos para riego por la falta de lluvias- fue muy criticada por la Junta que la acusó de poner en peligro el abastecimiento de agua para consumo humano.

El presidente de la Confederación, Manuel Vizcaíno, en conferencia de prensa, indicó que las condiciones climatológicas pueden variar la dotación aprobada, informa Europa Press. Parias subrayó que si las lluvias persisten en primavera es probable que no haga falta todo el volumen previsto, por lo que las reservas aumentarían. Vizcaíno, cuyo nombramiento corresponde al Gobierno central, aprovechó la ocasión para hacer una encendida defensa del proyecto del Plan Hidrológico Nacional elaborado por el Ministerio de Medio Ambiente . 'A Andalucía le ha tocado la lotería, porque las inversiones previstas por el Gobierno superan los 700.000 millones', aseguró.

Vizcaíno informó de que el pantano de Aracena, al límite de su capacidad ya está soltando agua, tras recoger el desembalse del Zufre. Esta operación también afectará a las presas de La Minilla y el Gergal en Sevilla. En los pantanos de Quéntar, Portillo y Bermejales, en Granada, el pantano de La Breña en Córdoba y los pantanos de Hurones, Guadalcacín y Bornos también ha habido desembalses de alivio.

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