El presidente de La General sólo cobrará por su trabajo una asignación para gastos

El presidente de la Caja General de Ahorros de Granada, Julio Rodríguez López, reducirá su remuneración a un máximo de 500.000 pesetas mensuales en concepto de gastos y dietas justificados. El consejo de administración aprobó ayer tarde una propuesta del propio Rodríguez para adaptar sus percepciones a los nuevos estatutos de La General. El presidente de la caja percibía alrededor de 21 millones de pesetas anuales. La ley de Cajas de Andalucía prohibe que los presidentes no ejecutivos tengan derecho a un sueldo.

Julio Rodríguez, antiguo consejero socialista de Economía de la Junta, ha acatado la sugerencia de la nueva ejecutiva del PSOE granadino para que redujera su remuneración a un cuarto de lo que percibía hasta ahora. Hace un año, a pesar de que la ley de Cajas aprobada en diciembre de 1999 prohibía que los presidentes que no tuvieran carácter ejecutiva cobraran un sueldo, el consejo de administración de La General respetó la remuneración al entender que el artículo de la ley no sería efectivo hasta que la caja se dotara de sus nuevos estatutos.

El pasado 12 de enero la Consejería de Economía aprobó por fin los estatutos con lo que, en la práctica, el presidente de la Caja General se quedaba sin sueldo. La Ejecutiva socialista dio instrucciones a sus representantes en el consejo de administración para que respetaran escrupulosamente la ley y, en concreto, lo referido a la imposibilidad de dotar con un sueldo una presidencia no ejecutiva.

Propuesta al consejo

Julio Rodríguez aceptó la sugerencia y él mismo presentó ayer una propuesta al consejo para, a partir de ahora, sólo percibir gastos y dietas debidamente justificados con un límite mensual de medio millón de pesetas. Al término del consejo extraordinario, la enmtidad de ahorros emitió un conciso comunicado en el que informaba que el órgano había decidido, tras analizar la situación creada tras la aprobación de los estatutos, 'transformar la remuneración salarial' en una consignación de gastos.

Julio Rodríguez no podrá cobrar por otro concepto durante los próximos siete meses que es el tiempo máximo previsto para que la caja granadina renueve totalmente sus órganos de gobierno. Con el calendario en la mano, la renovación ha de culminar antes del 12 de agosto aunque, debido a las vacaciones de verano, está previsto que los órganos estén renovados a finales del mes de julio.

Será entonces, a la vista de la composición de la asamblea, del consejo de administración y del partido que sustente la mayoría política, cuando se decida quién será el nuevo presidente de La General y, en su caso, si el puesto permanecerá como hasta ahora o si por el contrario tendrá caráctrer ejecutivo, en cuyo caso la persona elegida recuperaría el derecho a percibir unos emolumentos fijos.

El PSOE, por el momento, se resiste a adelantar acontecimientos hasta no conocer la proporcionalidad política en la caja una vez renovados todos los órganos de gobierno. No obstante, la nueva ejecutiva socialista ha dejado entrever que está dispuesta a alcanzar un consenso con el PP para no perjudicar la imagen de La General que, en los últimos tiempos, se ha visto envuelta en numerosas controversias, una de ellas referente a un supuesto informe interno donde se recomendaban una serie de iniciativas para favorecer el triunfo de los socialistas en las elecciones municipales del mes de junio de 1998.

Julio Rodríguez, natural de Motril, de 57 años, tiene una plaza en el Servicio de Estudios del Banco de España. Durante el gobierno de José Rodríguez de la Borbolla fue designado consejero de Economía y Hacienda. Con posterioridad ocupó en Madrid la responsabilidad de presidente del Banco Hipotecario. En 1994 regresó a Granada para ocupar la presidencia de la Caja General de Ahorros. En una ocasión intentó sin éxito que la asamblea modificara los estatutos y convirtiera la presidencia en ejecutiva.