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'Guti es una nena que se lamenta mucho'

El delantero Darío Silva, del Málaga, dice que dio patadas al madridista 'para que aprenda'

'Con Guti no pasó nada, sólo que tuvimos unas palabras. Le hice una entrada, pero fue para que aprendiera. Él me había hecho una parecida y no estaba dispuesto a aguantar otra. Si me dan, yo doy. Él es una nena y un maricón (sic), porque se lamenta mucho. Además, le queda mucho por aprender, porque el fútbol es para hombres y él parece que no está preparado para jugar'. Así se despachó ayer en la SER el delantero del Málaga Darío Silva acerca de su polémica actuación el pasado domingo en el Bernabéu y, en particular, de la fuerte entrada en plancha que le propinó al centrocampista madridista Guti.

Corría el minuto 53 de partido cuando Darío Silva, en pelea por un balón con Guti, dejó la pierna estirada y dio un fuerte golpe al madridista en el tobillo. Una infracción que el colegiado del encuentro, Llonch Andreu, no señaló, como tampoco hizo con el roce posterior que protagonizaron ambos jugadores. 'Lo hice para que aprendiera, al igual que ya hice con Esteban (portero del Oviedo con el que también se enzarzó hace algunas jornadas). Yo cuando entro siempre lo hago con fuerza, pero sin mala voluntad', justificaba el uruguayo. Pero éste no fue un hecho aislado. Dos minutos después de su incidente con Guti, Darío Silva volvió a las andadas, aunque esta vez fue Figo el destinatario de su fuerte entrada por detrás. Antes, el delantero uruguayo tuvo un violento encontronazo con Casillas, choque que al portero del Madrid le costó una muela. Una patada a destiempo sobre Míchel Salgado le costó una tarjeta amarilla y su encontronazo posterior con Hierro le valió ser sustituido por lesión.

Pero las críticas de Darío Silva no se detuvieron en Guti, sino que también fueron dirigidas a las estrellas de los grandes equipos y a los árbitros: 'Ellos creen que les tienen que proteger más que a los demás y yo ante eso me rebelo. Somos futbolistas como ellos, al igual que los de Segunda División, y los árbitros deben medirnos a todos por el mismo rasero'.

Así, el uruguayo cree que aunque le tilden de violento y polémico, esto no le pasará factura: 'Yo no voy a cambiar mi forma de jugar. Lo doy todo por defender al Málaga. Soy un futbolista que siempre va de cara y juega a la verdad. Pienso que soy sincero y quizá digo lo que otros piensan y no se atreven a decir'.

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