Las condiciones y los informes

El secretario de Estado José Folgado y el responsable de los servicios de la Competencia del Ministerio de Economía, Luis de Guindos, destacaron ayer que las condiciones impuestas por el Gobierno a la fusión de Endesa e Iberdrola han seguido las recomendaciones del Tribunal de Defensa de la Competencia y de la Comisión de la Energía. Ambos negaron que el Gobierno haya 'suavizado' las recomendaciones de ambos organismos a pesar de que Competencia abogaba por limitar la capacidad de generación de la nueva empresa fusionada al 35% y daba un plazo de seis meses para que vendiera parte de sus activos. La capacidad de generación aprobada para la nueva Endesa Iberdrola ha sido del 42% y el plazo máximo para desinvertir, de 14 meses.

Para avalar la 'dureza' del Gobierno con la operación, Luis de Guindos destacó que el Gobierno ha impuesto la obligación a la nueva compañía de limitar al 60% la cuota de comercialización de nuevos contratos con clientes allí donde también distribuya electricidad. Esta recomendación no había sido contemplada explícitamente, según Economía, ni por la Comisión de la Energía ni por el Tribunal de Defensa de la Competencia.

Folgado y De Guindos aportaron otro detalle que puede ser importante de cara al futuro de la operación. Así, señalaron que si alguno de los lotes de activos que saldrán a subasta para su venta no encuentra comprador, volverá al seno de la nueva compañía. Ello quiere decir que, teóricamente, al final del proceso, la nueva empresa fusionada podría superar los límites impuestos a su unión el viernes.

En cumplimiento de los plazos decididos el viernes, Endesa e Iberdrola deberán presentar un Plan de Desinversiones en 10 días naturales a contar desde ayer. El plazo se cumplirá el martes, día 13.