El espacio de La 2 'Línea 900' prolongará esta temporada su trayectoria de reportajes sociales
La 'larga trayectoria de reportajes de contenido social' del espacio de los domingos de La 2 Línea 900 ha sido reconocida por el Imserso (Instituto de Migraciones y Servicios Sociales). Este organismo, que entregará sus premios correspondientes al año 2000 el próximo 8 de febrero, destaca 'la sensibilidad' que aportan los contenidos de este programa de periodismo de investigación. Elaborado en el centro de TVE en Sant Cugat, comenzó su andadura en catalán; cumplirá en octubre sus 10 años de emisión en castellano y a lo largo de esta temporada se mantendrá en su línea social.
El precio del viento, sobre el impacto económico y paisajístico de la energía eólica; Domicilio la calle, seguimiento de ciudadanos sin techo, y Sin libro de familia, sobre las dificultades de las parejas de hecho, son los próximos reportajes de Línea 900. También abordará la contaminación radiactiva, los embarazos adolescentes, las adopciones de niños extranjeros y la inserción de drogadictos.
'Simplemente fotografiamos la realidad tal y como es. No seguimos pautas de sensacionalismo, porque no nos interesa la información-espectáculo', afirma Rafael Robledo, director de Línea 900.
Mallorca a tientas, crónica de un viaje turístico organizado para ciegos; Iguales pero diferentes, documento sobre los pacientes de una extraña enfermedad genética, y Viejo y solo, retratos de ancianos que viven solos en la gran ciudad, han sido programas decisivos en la concesión del premio del Imserso a Línea 900. Y otro reportaje, emitido en octubre de 2000, ha sido seleccionado para el Input 2001, escaparate internacional de producciones televisivas de calidad. Se trata de Christian y Paquita, diario de la convivencia de un disminuido psíquico con su madre.
'Nos mantendremos en las líneas habituales: rigor, seriedad y denuncia, y seguiremos utilizando cámaras ocultas, pero no como una moda', explica el periodista.
'No queremos que nos cuelguen la etiqueta de protestones, pero esto no significa que no queramos comprometernos. Tenemos espíritu de servicio público y damos elementos de crítica, queremos inducir al espectador a la reflexión', insiste Robledo. 'Nos gustaría tener más competencia, con más programas de investigación sobre la realidad social española', añade.
A propósito de la polémica en torno al cambio de emisión de un reportaje de Línea 900 sobre Franco el pasado año, Robledo considera que hubo 'un problema de descoordinación' entre el espacio y los responsables de la cadena estatal, pero niega la existencia de presiones: 'Si se hubieran producido censuras yo no estaría aquí'.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.