La historia reciente de Segunda le niega el ascenso al Atlético

A 12 puntos de los puestos de ascenso, con 30 jugadores utilizados en 22 partidos -y alguno más, como el suizo Wicky, que estará en liza en breve-, con 16 puntos perdidos ya ante su numerosa afición... Al Atlético le contemplan unos cuantos números de corte siniestro. Pero el peor es aquel que indica que en las 10 últimas temporadas ningún equipo logró el ascenso encontrándose en la situación que se encuentra el Atlético.

Lo más parecido sucedió en la pasada campaña, cuando a estas alturas de competición el Villarreal se encontraba a ocho puntos de los puestos de honor. La segunda vuelta de los castellonenses fue espectacular y lograron un ascenso que se antojaba imposible. El Atlético posee hoy 29 puntos y está, a falta de 20 partidos, a 12 -o sea, a cuatro partidos ganados- del Sevilla, el tercero de la clasificación.

Decía Futre tras el empate frente al Levante que el equipo no podía seguir perdiendo puntos en casa. Pero con ser eso grave, pues ya ha dejado escapar 16 puntos ante los suyos -que le han visto empatar en cinco ocasiones y perder en dos- más lo es que sólo cuatro equipos hayan sacado peores resultados a domicilio, donde el botín del Atlético se reduce a nueve puntos, los que le otorgaron dos victorias y tres empates.

Y no será porque el cuerpo técnico no lo haya intentado de todas las maneras posibles. Al menos, en cuanto a cantidad de jugadores. No hay equipo en la categoría que haya probado con más gente que el Atlético, cuya camiseta ya han vestido esta temporada hasta 30 futbolistas. Y otro apartado oscuro en el que el equipo se ha destacado es el referente a las tarjetas. Ha recibido 84 amarillas, sólo superado por el Elche (93), que también le supera en expulsiones, 13 por nueve. En este aspecto, llama la atención la estadística de Salva, un futbolista que aúna el mejor orstro y el peor de este equipo. Es, con diferencia, su máximo goleador, con 10 tantos. Y ésa es la misma cantidad de tarjetas que ha visto -ocho amarillas y dos rojas-. Tampoco ahí le supera nadie en una plantilla que, visto lo visto, aún espera nuevos inquilinos.