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MANIFESTACIÓN CONTRA EL 'TIRELESS'

Críticas a Aznar por sus ironías sobre la protesta de Algeciras

La polémica por la manifestación del sábado contra el Tireless continuó ayer con igual intensidad que en los días previos al acto. El PP insistió en que la concentración de Algeciras iba dirigida contra el Gobierno de la nación, pero a diferencia del día anterior ya no habló de 'fracaso' de la convocatoria, habida cuenta que todos los medios de comunicación situaron la asistencia entre 50.000 y 60.000 personas. También hubo críticas a José María Aznar por su valoración del acto del sábado.

Las críticas del PP se dirigieron hacia Manuel Chaves quien, en calidad de presidente de la Junta de Andalucía, estuvo en la cabecera de la manifestación. La presidenta popular, Teófila Martínez, insistió en que el acto fue un 'mitin' del PSOE para conseguir que Chaves 'se luciera' y que se utilizó como 'percha política de confrontación' contra el Gobierno central. El secretario general del PP, Antonio Sanz, añadió otros adjetivos. Llamó al presidente andaluz 'agitador de masas' y 'campeón de la doble moral', al tiempo que lo acusó de 'deslealtad institucional muy grave' y de 'representar en exclusiva los intereses' del PSOE.

La respuesta a los populares vino no sólo del lado socialistas, sino de la propia Plataforma Antisubmarino, convocante de la manifestación, y de la Unión de Consumidores de Andalucía, cuyo presidente, Juan Moreno, consideró 'un insulto' a los andaluces el que se atribuyera la movilización ciudadana del sábado a un partido. 'Fue una auténtica movilización ciudadana de un conjunto de la población andaluza que no entiende por qué un submarino nuclear que han rechazado otros países tiene que ser reparado' en el puerto de Gibraltar, dijo. El alcalde de Algeciras y miembro de la Plataforma, Patricio González, apostilló sobre la presencia de Chaves: 'No se le puede acusar de capitalizar la movilización porque él no vino porque quiso, sino porque desde el Campo de Gibraltar se le pidió y como presidente de todos los andaluces aceptó'.

Por parte del PSOE, sus dirigentes insistieron en el aislamiento de los populares. Chaves subrayó la 'gran derrota política y social' del PP por la manifestación contra el Tireless y dijo que 'el problema no está en los autobuses fletados' sino en la presencia de la nave en Gibraltar.

Pero lo que causó mayor irritación no sólo a los socialistas sino a otras organizaciones fueron las valoraciones en tono irónico del presidente del Gobierno: 'Tengo la impresión de que algunos van a volver a manifestarse contra la OTAN porque necesitan vitalmente autobús, bocadillo y manifestación', aseguró Aznar el domingo.

El alcalde de Algeciras consideró 'ofensivas' estas declaraciones y la vicesecretaria del PSOE, María del Mar Moreno, apreció 'falta de respeto a los andaluces'. El secretario del PA de Cádiz, Ricardo Chamorro, comentó que eran 'más propias de un chufla' y el consejero de Gobernación, Alfonso Perales, dijo que 'humillaban' a los andaluces.

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